el verano se resistió a decir adiós ayer en Amurrio, que celebró la 22 edición del Artzain Eguna bajo un agradable resolillo que animó a cientos de personas a secundar la cita, aunque sí se echó en falta la presencia de algunas explotaciones y queserías alavesas por la coincidencia de la fiesta con el certamen internacional de perros pastor de Oñati. A los animales protagonistas de la jornada, las ovejas, no les hizo mucha gracia la temperatura reinante, pero quienes no se dejaron amedrentar por Lorenzo fueron los pastores homenajeados de la jornada. Y es que si hay algo a lo que están acostumbradas las personas que ejercen esta actividad es a mantener el tipo en las cumbres, cuidando de su ganado, brille el sol o nieve. Su llegada fue recibida con sonidos de txalaparta y danzas vascas, en torno a las 11.30 horas, y todos ellos fueron obsequiados con txapelas, pañuelos y makilas por la importante labor que han llevado a cabo a lo largo de su vida.

Se trataba de Carmen Pérez de Albeniz de Munain, José Meabe, de Gujuli, y José Ramón Martínez Elejalde, de la localidad ayalesa de Aguiñiga, para quien la fiesta resultó redonda por partida triple. No en vano, su explotación y quesería, la de Larrabe, se llevó 550 euros por tener, y ya van varios años seguidos, el mejor rebaño de producción lechera de Ayala. No fue su único galardón, ya que su queso volvió a resultar elegido como vencedor por el público, llevándose otros cien euros. “El secreto es tratar con mucho mimo a las ovejas para que nos den buena leche”, aseguró.

Y a donde van los pastores llevan sus ovejas. De hecho, el público pudo disfrutar ayer de 248 ejemplares de ovino de raza latxa de alta calidad, que conformaron una exposición de las mejores ovejas en control lechero y de latxas de cara rubia y negra, así como del concurso interprovincial de ganado, en el que se dio cita una veintena de ganaderos que presentaron 18 carneros, 19 lotes de cinco ovejas, y otros 15 lotes de cinco corderas y un cordero. En el certamen, que repartió 1.620 euros en premios, resultó vencedor en ovejas Zigor Aspiunza, de Llodio; mientras que Montserrat Mendibil (de Amurrio) y María Ascensión Castresana (de Belunza) acercaron a la cita los mejores carneros y las mejores corderas, respectivamente.

241 litros por oveja A nivel provincial, el rebaño de ovejas latxas de cara negra que más leche ha producido ha sido el de Albeniz Ramírez de Arriola, con una media de 241 litros por oveja, mientras que la quesería La Leze de Ilarduia se llevó el trofeo de mejor rebaño lechero de cara rubia, con una media de 300 litros por oveja. Ambos repetían éxito y se hicieron con un cheque de 650 euros. “Nuestra oveja más lechera ha dado nada menos que 551 litros en los 120 días desde que paren, en los que se lleva el control a todas las explotaciones, para que el resultado sea equitativo”, explicó Arkaitz Jauregi. Un joven que acudió a Amurrio con una muestra de “las 400 ovejas del rebaño familiar que criamos en la Sierra de Altzania, porque mis padres han ido a Oñati a concursar con el perro”, explicó en referencia a los pastores Eli Gorrotxategi y José María Jauregi.

No fue el único joven del mundo pastoril alavés presente en este XXII Artzain Eguna. De hecho, en las inmediaciones del frontón se encontraban los ayaleses Asier Bolivar y Ainara Gotxi de Olabezar que, junto al veterano Iñaki San Juan de Llodio, llevaron a cabo la demostración de esquileo tradicional (tijera) y neozelandés (mecanizado). “Hemos traído 15 ovejas que nos darán para en torno a una hora de trabajo. Tengo 60 años y fue mi padre quien me enseñó a esquilar a mano con 14. A máquina llevaré otros 15. Nos hacemos mayores, no hay relevo generacional y aunque los pastores eran reacios a avances tecnológicos, al final te haces a todo, porque no es lo mismo tener que esquilar 15 ovejas para una exhibición, que un rebaño de más de cien”, subrayó San Juan. Por su parte, Ainara Gotxi se encargó de la demostración manual, que “es como se sigue haciendo hoy día en mi casa”.

Mientras tanto, en la plaza Juan Urrutia los jueces andaban atareados con la cata y puntuación de los quesos que tomaron parte en el IX concurso de Idiazabal. A este certamen solo podían concurrir pastores alaveses propietarios de rebaños con un mínimo de 100 reses y quesos con una maduración mínima de dos meses. Dados los requisitos, congregó a diez participantes, de los que el segundo y tercer clasificados fueron la quesería de Patxi Lopez Uralde de Larrea (250 euros) y la de Azkarra de Galarreta (200 euros), siendo el ganador de los 300 euros del primer premio la quesería Aixtra de Araia, que también se llevó un hermoso trofeo que fue entregado por el hijo de la persona a la que está dedicado este certamen, Ruperto Casanueva. El queso ganador, que como novedad fue subastado, salió por 351 euros y se fue para El Antojo de Respaldiza.

La cita se complementó con demostraciones de elaboración de queso y degustaciones, una comida popular y el concurso de perros pastor memorial Justo Furundarena.