Vitoria - Al diputado foral Javier Ruiz de Arbulo se le acumulan los desatinos al final de su malogrado mandato. A su tortuosa relación con las entidades locales del territorio y con el resto de los grupos junteros, se ha sumado su polémica gestión de la sociedad pública Arabako Lanak -que le ha costado incluso ser el único diputado reprobado en las Juntas Generales de Álava en esta legislatura tras la comisión de investigación-. Ahora, además, el diputado de Administración Local ha perdido una demanda que interpuso contra DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA por las informaciones desveladas por este periódico sobre su actividad profesional, por las que también tuvo que ofrecer explicaciones en el Legislativo foral.

El Juzgado de Primera Instancia número 1 de Vitoria-Gasteiz acaba de desestimar la demanda que Ruiz de Arbulo puso contra DNA y le condena en costas, después de que este diario publicara que el diputado tardó quince meses en formalizar ante el Registro Mercantil su cese como administrador único del despacho Essan Abogados, actividad incompatible legalmente con el ejercicio de su cargo público.

DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA publicó en su edición del pasado 26 de febrero que el titular alavés de Administración Local, Ruiz de Arbulo, no declaró un cargo societario incompatible con su ocupación como diputado foral. Sí formalizó su cese profesional, pero en octubre de 2012, es decir, quince meses después de su nombramiento como cargo público de la Diputación alavesa.

El propio diputado alegó al día siguiente de la publicación de estas informaciones que en el mismo momento en el que fue nombrado diputado escrituró un acta notarial por la que cesaba formalmente en su actividad mercantil, un extremo que también fue contrastado y publicado por DNA, aunque el acta que certificaba este cese no lo llegó a inscribir en el Registro Mercantil hasta quince meses después, ni la notificó a las Juntas Generales, ni constaba ante ningún tercero. Posteriormente, este diario complementó la información al publicar que el Registro Mercantil no le aceptó la formalización de este trámite porque su firma Essan Abogados llevaba varios años sin estar al corriente de la presentación de sus cuentas.

La revelación de estas informaciones, aun cuando DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA publicó todos los extremos que le hizo llegar Ruiz de Arbulo, le llevaron al diputado a presentar una demanda contra este periódico, aunque la jueza la ha desestimado, condenando además al diputado en costas.

La demanda de Ruiz de Arbulo se fundamentó en la Ley Orgánica 2/1984 de derecho de rectificación para exigir un desmentido expreso, aunque la sentencia del Juzgado número 1 de Vitoria, sin cuestionar la veracidad de las informaciones publicadas, considera que DNA cumplió con la jurisprudencia de esta ley, que exige “procurar la existencia pública de versiones diferentes sobre unos mismos hechos, como sistema para que el público pueda hacerse una idea mejor de la realidad”.

En este sentido, citando la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid 47/2011, el Juzgado de Primera Instancia vitoriano subraya que el derecho de rectificación “no trata de cuestionar la información o corregirla, sino de ofrecer más información”.

La argumentación del fallo abunda incluso en jurisprudencia del Tribunal Constitucional -aludiendo a la sentencia 99/2011- al apuntar que “la inserción de la rectificación en la que se disiente de los hechos divulgados no impide al medio de comunicación difundir libremente información veraz, ni le obliga a declarar que la información aparecida en sus páginas sea incierta, ni a modificar su contenido”, como pretendía la demanda planteada por el diputado alavés.

Pero este último varapalo judicial no es sino una puntilla que Javier Ruiz de Arbulo se ha topado al final de su mandato después de haber protagonizado reiteradas polémicas en las Juntas Generales de Álava, sobre todo a raíz de su gestión en la sociedad pública foral Arabako Lanak, lo que motivó la apertura de una comisión de investigación y la reprobación del diputado de Administración Local con el voto de todos los grupos junteros, salvo del PP gobernante. - DNA