gasteiz - La plantilla del Instituto Foral de Bienestar Social (IFBS) protagonizará esta mañana su tercer paro parcial -entre las 9.00 y las 11.00 horas- en respuesta a las "imposiciones" de su gerencia y, por extensión, de la propia Diputación alavesa. Será una protesta diferente a las dos anteriores, en las que los trabajadores se concentraron frente al Palacio de la Provincia. En esta ocasión, éstos se manifestarán desde las 9.30 horas por las principales calles del centro de Gasteiz y finalizarán su marcha en las inmediaciones de la sede del ente foral, de donde también partirán. Más de 400 personas de las 1.000 que configuran la plantilla fija del IFBS, trabajadores de las residencias de mayores o de discapacidad, de oficinas y de recursos de intervención social, entre otros, se sumaron a las movilizaciones anteriores, una cifra notable si se tienen en cuenta los servicios mínimos.
El conflicto que azota a la institución, encendido definitivamente tras la modificación unilateral de los calendarios de los trabajadores, se perpetúa. Mientras éstos salen de nuevo a la calle y el encierro en la residencia Txagorritxu llega ya a los 70 días, la Junta de Personal vuelve a buscar el apoyo de los grupos políticos con representación en las Juntas Generales para abrir nuevas vías de solución ante la falta de avances en la negociación con la gerencia. Los representantes de los trabajadores se reunieron ayer con EB y el PSE y hoy por la tarde lo harán con el PNV. En los próximos días el encuentro se repetirá con EH Bildu, por lo que podrán exponer sus preocupaciones ante toda la oposición en la Cámara alavesa, que hace unas semanas ya aprobó una moción en apoyo a la plantilla del IFBS.
La próxima reunión con la gerencia tendrá lugar mañana, una semana después de un último encuentro que lógicamente no encontró soluciones. La plantilla busca negociar "partiendo desde cero", el escenario anterior a los cambios de los calendarios. Los trabajadores, eso sí, remarcan que éste sólo ha sido el detonante de un conflicto que tiene su origen en dos años largos de gestión del PP marcados por el "autoritarismo", los recortes y las decisiones impuestas.
"Como trabajadores con tantos años de servicio no merecemos este trato. Como profesionales, no aprobamos la arbitrariedad de medidas impuestas sin rigor técnico. Y como ciudadanos, no admitimos esta forma de dirigir autoritaria en una institución pública que es de todos, también nuestra", censuró ayer la Junta de Personal, que volvió a mostrarse abierta a una negociación basada en el "equilibrio".
La de hoy no será la única protesta que la plantilla del IFBS lleve a cabo esta semana, porque el viernes también emprenderá una caravana de coches por las calles de Vitoria. El próximo lunes está prevista la próxima asamblea con los trabajadores del sector, en la que podrían tomarse nuevas decisiones.