Vitoria. Si la aversión de los grupos junteros al borrador presupuestario que elaboró el Gabinete de Javier de Andrés pudiera cuantificarse llegaría a 499. Es el número de enmiendas que han presentado PNV, EH Bildu, PSE y Ezker Batua Berdeak -tres a la totalidad y el resto parciales-, aunque los tres últimos han cumplido con su labor a sabiendas de que tienen poco o nada que rascar. El acuerdo entre populares y nacionalistas anunciado la semana pasada, a tan sólo cuatro días de que finalizara el plazo de presentación de propuestas correctoras, deja al resto de formaciones escasas posibilidades para influir en las futuras Cuentas. La alianza blinda al menos por dos años la estabilidad institucional de Álava con 20,9 millones de euros destinados, según sus impulsores, a la reactivación económica del territorio y la generación de empleo.

De esas 496 enmiendas, 102 corresponden al PNV y son las que ya están incluidas en el pacto presupuestario. La ley, no obstante, es protocolaria y ahora obliga a debatir éstas y todas las demás. Este mismo viernes se abordarán las enmiendas a la totalidad que han registrado respectivamente EH Bildu, PSE y Ezker Batua Berdeak. Los tres grupos han optado por esta vía para evidenciar su disconformidad de fondo con el proyecto de Cuentas, del que dicen que no garantiza las necesidades de la población ni recupera partidas recortadas, aunque saben que sus órdagos no saldrán adelante porque sería preciso contar con el apoyo de los nacionalistas. Y éste es para el PP. Por eso, han preparado toda una batería de enmiendas parciales. Las que los junteros abordarán y votarán el martes y miércoles de la próxima semana. Después, ya sólo quedará la ratificación del documento final en el Pleno, que se celebrará el viernes 20.

EH Bildu ha presentado 28 enmiendas parciales, de entre las que destacan sus propuestas de subir un 1% la aportación a las entidades locales, poner cuatro millones de euros más en materia social o acercar la partida del euskera al 2% del Presupuesto general. Los socialistas han sido especialmente prolíficos este año, con 328 propuestas para dibujar unas Cuentas alternativas, como el incremento en cuatro millones del Instituto de Bienestar Social, una partida de un millón para las familias que no puedan pagarse la calefacción ni el agua caliente, un 40% más para deporte escolar, más apoyo a autónomos o la recuperación de la financiación perdida para eventos culturales como el Festival de Jazz. Las 38 enmiendas restantes son de EB.