vitoria. Los socialistas no ven en el gesto de Maroto buena voluntad, sino "un nuevo fracaso político" del alcalde. Era predecible que el último grupo municipal al que el primer edil comunicara ayer la retirada del proyecto de ordenanzas fiscales reaccionara con dureza. No hay feeling, ni parece que vaya a haberlo. "Con esta marcha atrás, Maroto vuelve a demostrar su incapacidad para cerrar acuerdos porque en su estrategia política prima la imposición sobre el consenso", subrayó la concejal del PSE Marian Gutiérrez, responsable del departamento de Hacienda en la pasada legislatura.

Según Gutiérrez, "en cuanto Maroto ha visto que no había juego se ha llevado su juguete, porque para él los presupuestos y las ordenanzas son un instrumento a su servicio, no al servicio de la ciudadanía". El PSE recordó que el alcalde ya retiró su proyecto de Cuentas este año al no encontrar aliados y optó por una prórroga. Y eso, a su juicio, se merece un apodo. "Es el alcalde del retranqueo, al que no le importa dar marcha atrás una y otra vez en sus decisiones, práctica política nada buena para la ciudad puesto que sólo genera desconfianza en la ciudadanía y en los grupos de la oposición. Lo nunca visto, una tomadura de pelo", criticó la edil, quien se preguntó dónde queda el respeto al trabajo que los grupos municipales habían desarrollado sobre el viejo borrador.

El PSE ha decidido seguir adelante con su enmienda a la totalidad de las ordenanzas fiscales, si bien el borrador al que se refiere ya no existe. En ella, hace referencia al "incumplimiento" del compromiso del gobierno de tramitar conjuntamente ingresos y gastos, así como a la no aplicación de la máxima de que aporte más quien más tenga. Además, alerta de que en algunas tasas y precios públicos se plantean "incrementos sustanciales" sin que existan

informes que los justifiquen.