vitoria. El debate en torno a la deuda del tranvía volvió a pasar ayer por la Casa Consistorial. Pero, esta vez, realizó su avance definitivo. La propuesta del PSE de reordenar el Presupuesto municipal vigente, el de 2010, para abonar al Gobierno Vasco ocho millones de euros debidos por las obras del metro ligero salió adelante gracias al apoyo del PNV. Antes, ambas fuerzas rechazaron las enmiendas presentadas por EA, EB y PP, contrarios a una maniobra presupuestaria que consideran una falta de seriedad en la ejecución de las Cuentas municipales.

El Ayuntamiento acogió ayer una jornada maratoniana de comisiones con la presentación del Presupuesto municipal para 2011 por la mañana y por la tarde, que sólo se frenó para celebrar una comisión de Hacienda y un Pleno que sólo tenían un propósito: cerrar la conocida deuda del tranvía.

El Gobierno Vasco apremió al Ayuntamiento a transferirle algo más de ocho millones de euros por las obras de instalación del tranvía en Gasteiz. A pesar de que ese dinero estaba reservado en su día por el PP mediante créditos de compromiso, el gabinete Lazcoz ya defendió que durante los últimos ejercicios la prioridad había sido atender a los proveedores vitorianos. Y, ahora, proponía una maniobra presupuestaria para obtener ese dinero pendiente de partidas reservadas para otros proyectos estratégicos, como los centros cívicos de los nuevos barrios, el soterramiento o el Casco Medieval.

La medida, sin embargo, sólo contó con el apoyo del PNV, que en todo momento defendió la corrección del paso pero lamentó la imagen dada. PP, EB y EA, mientras, presentaron enmiendas en contra de la propuesta. El grupo abertzale, por ejemplo, propuso crear una nueva partida de ocho millones para el tranvía en el Presupuesto de 2011. Pero, tras el paso dado ayer, ese dinero se abonará ya este año.