Vitoria. Los modernos frontones de Lakua, inaugurados hace casi dos años, tendrán que ser reparados. El Ayuntamiento, que en su día adjudicó por más de 1,1 millones la construcción a la empresa Fonorte, exigió a la firma que solventara una serie de deficiencias detectadas -pero no resueltas- durante el periodo de garantía. El Consistorio, así, opta ahora por retener parte de la fianza de la constructora, en concreto 7.900 euros, para así financiar estas reparaciones en, entre otras cuestiones, grietas y goteras.

Estos errores no han impedido que las instalaciones, anejas al centro cívico de Lakua, siguieran utilizándose. Sin embargo, usuarios del recinto sí insisten en que estos problemas eran visibles desde el mismo día de la inauguración. Un mes después, grupos municipales ya criticaron que la nueva instalación parecía un recinto de más edad. Los frontones de Lakua abrieron sus puertas el 1 de septiembre de 2008 y, entonces, ya arrastraban cierta controversia, puesto que el estreno se esperaba para casi un año antes. En cualquier caso, hubo que esperar hasta octubre para iniciar la actividad, dado que la gestora del recinto, la Federación Alavesa de Pelota, tuvo que limpiar la sala, acondicionar espacios y realizar otros preparativos.

Estas instalaciones se adjudicaron a Fonorte Empresa Constructora SA el 13 de noviembre de 2006 por 1.105.120 euros, IVA incluido. La obra se recibió el 12 de febrero de 2008 y, justo un año después, el Consistorio notificó a la compañía la necesidad de que subsanara una serie de deficiencias. Se trata de la insistente aparición de unos orificios en la pared de frontis, la presencia de grietas en la solera de hormigón, goteras en la contracancha -junto a la escalera metálica de graderío y en la zona para personas con discapacidad-, la existencia de coqueras en la superficie de asfalto fundido que afectan al bote de la pelota, el hecho de que la puerta de salida al frontón exterior se abriera sola por la mera acción del viento y, finalmente, que la climatizadora no alcanzaba la temperatura suficiente durante los días de frío y, por tanto, la sensación es que el edificio no está calefactado.

El Consistorio, además, defendió que los errores se habían detectado dentro de la garantía -el miedo de los grupos era que se hubiera pasado de fecha- y puso un plazo máximo para estas reformas: un mes. Y se advirtió a la compañía de que, si realizaba las reparaciones quedaría "revelado de toda responsabilidad", pero que en caso de que no recibiera un informe -a cargo de la dirección facultativa de las obras- negativo, tendría que asumir los trabajos "sin derecho a percibir cantidad alguna por ampliación del plazo de garantía".

retiene parte de la fianza Pero esos esperados avances no han llegado. Según ha podido saber este rotativo, esta falta de actuación se debe a que no se veía con buenos ojos alguno de los cambios exigidos por el Ayuntamiento en el proyecto. Sea como fuere, el 7 de abril, la adjudicataria exigió al Ayuntamiento la devolución de la fianza, de 44.204,81 euros, tras la que se produjo una nueva petición de que se resolvieran los defectos citados en cuatro semanas. Sin embargo, los técnicos determinaron que, dado que no se había ejecutado actuación alguna para reparar esos errores, y puesto que el Consistorio considera "una necesidad imperiosa" resolverlos, se opta por retener 7.900 euros de la fianza.

Así, la Junta de Gobierno Local apostó a finales de julio por iniciar un expediente para ejecutar de forma subsidiaria las reparaciones pendientes, que desde el Servicio municipal de Arquitectura cifraron en los 7.900 euros mencionados. Esta penalización se suma, así, al historial de estos frontones. Las instalaciones permanecen ahora cerradas, como ocurre en la mayoría de los centros cívicos de la ciudad en agosto, incluido el de Lakua; los usuarios, mientras, esperan que las deficiencias se solventen de forma rápida para que la pelota pueda seguir botando.