- Tres personas han fallecido en accidentes de tráfico en el presente mes de julio, una en cada territorio histórico, lo que supone dos menos que en el mismo periodo del pasado año. Eso sí, en lo que va de ejercicio, las víctimas mortales se elevan a 29, cuatro más que el pasado año. Así lo apuntó en declaraciones a los medios en la autopista AP-8 en Irun, la directora de Tráfico del Gobierno Vasco, Sonia Díaz de Corcuera, en una primera valoración de la operación salida-retorno de verano, que se está desarrollando con “más flujo de tráfico interno en Euskadi y desde Euskadi a las limítrofes [Nafarroa, Rioja, Cantabria, Burgos] así como hacia otros puntos del Estado y hacia Iparralde”.

Ayer, como suele ser habitual en fechas como esta, el enlace de la A-1 con la AP-1 en Armiñón, sentido Burgos, registró retenciones en distintos momentos del día. A media tarde, las colas alcanzaban los tres kilómetros. El nudo de la N-622 con la AP-1 en Gasteiz, sentido Burgos, también fue escenario de atascos.

Según indicó Díaz de Corcuera, por el momento, en general la circulación “está siendo fluida y ligeramente mayor que el pasado año”, aunque “no tanto como en 2019 y 2018”. Díaz de Corcuera recordó que este fin de semana es tradicionalmente el “más complicado” del dispositivo veraniego, ya que “coincide el tráfico de salida con el de retorno” y es el que se prevé un “mayor número” de desplazamientos. “En el peaje de Irun ahora mismo hay ciertamente movimiento y el tráfico es constante, aunque no hay Operación Paso del Estrecho por segundo año consecutivo”, lo que supondrá previsiblemente un 14% menos de tráfico.

También indicó que “el tráfico internacional que está atravesando Euskadi está siendo, sobre todo, el procedente del norte de Europa con rumbo al sur de Portugal”. “Para facilitar el tránsito de estos vehículos hacia el país vecino se ha reforzado la señalización en puntos estratégicos de la red viaria vasca donde, además, se les informa de las áreas de servicio que encontrarán a su paso”, añadió Díaz de Corcuera. Asimismo, en esas áreas de servicio se recuerdan, en diferentes idiomas (euskera, castellano, inglés, francés y árabe), las medidas higiénicas de distancia social, uso de mascarilla y lavado de manos.

Debido a la ausencia de la Operación Paso del Estrecho (OPE) no está siendo necesario llevar a cabo las operativas que habitualmente se realizan para facilitar el enlace de la salida de la AP-1, en Etxabarri Ibiña, con la N-622 sentido Gasteiz y, en Gasteiz, en el enlace de la N-622 con la A-1, sentido Burgos-Madrid. Por otro lado, “para garantizar la fluidez”, se ha habilitado una señalización provisional en el nudo de Armiñón, en colaboración con la Diputación Foral de Araba, recomendando, en caso necesario, el uso de la ruta alternativa por la N-1 que discurre paralela a la A-1, entre La Puebla de Arganzón y el acceso a la AP-1 de Armiñón.

Según manifestó, desde el pasado 1 de julio han fallecido tres personas en las carreteras vascas (una en Bizkaia, otra en Araba y otra en Gipuzkoa), dos menos que el año pasado en el mismo periodo de tiempo. La zona que mayor densidad de tráfico local ha registrado ha sido la A-8 sentido Cantabria desde Bizkaia. El 9 de julio se registraron retenciones de hasta 15 kilómetros debido a la afluencia de vehículos. Por su parte, en Araba el 4 de julio se registraron retenciones de hasta ocho kilómetros en la N-124, en Armiñón, sentido Gasteiz, por afluencia de vehículos procedentes de La Rioja.