- España ha registrado hasta ayer 2.463 brotes con alrededor de 25.700 casos asociados en todas las comunidades y, de esos focos, 687 han sido notificados en la última semana, en su mayoría relacionados con el ocio y los encuentros familiares. El Ministerio de Sanidad añadió ayer otros 9.658 contagios de coronavirus, la mayor cifra de esta segunda ola, al cómputo global, que alcanzan ya los 429.507 desde el inicio de la pandemia; de ellos, 3.781 han sido diagnosticados en la última jornada, un día más la gran mayoría en la Comunidad de Madrid, que acumuló uno de cada cuatro casos.

Además, en la misma jornada, 880 personas fueron ingresadas -42 menos de las que se contabilizaron ayer-, con lo que el total de pacientes hospitalizados asciende a 6.036, de los que 715 están en las unidades de cuidados intensivos. No obstante, la tasa de ocupación de los hospitales bajó medio punto y se situó en el 5%, aunque la presión que soportan los centros madrileños y aragoneses es del más del doble de esa cifra (13% en ambas); también la superan la CAV (10%) y Baleares (9%). Como consecuencia, son las UCIS madrileñas las que más pacientes tienen (176), seguida de Catalunya (147).

El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, señaló que la situación en los hospitales está “tranquila” y lejana de la que sufrieron en marzo, cuando llegaron a aguantar una presión asistencial del 55% y hubo que ampliar las UCI “hasta por 4 y 5 veces”. “Entendemos que la presión ahora sobre los hospitales no es para nada importante, lo que no quita que alguno en concreto no pueda tener una presión mayor”, aseveró para añadir que, además, las altas van compensando los ingresos, ya que se han dado en el último día 644. Pese a que la presión del sistema asistencial “no es excesiva en la parte hospitalaria”, es cierto que se aumenta en la Atención Primaria, debido al esfuerzo diagnóstico y los estudios de contactos, reconoció el epidemiólogo.

Sanidad eleva en su último balance a 28.996 las personas que han perdido la vida en esta pandemia, lo que supone 24 más de los registrados la víspera; 132 han muerto en la última semana, casi la mitad (56) en Madrid. Los grupos más afectados por la segunda curva del coronavirus siguen siendo los jóvenes, “pero también hay incrementos en mayores”, según avanza la tasa de incidencia acumulada, que es ya de 183,87 casos por cada cien mil habitantes a catorce días. De hecho, explicó Simón, ahora mismo las incidencias son “mucho más altas” en la población escolar de hasta 17 años que en marzo o abril: de 80 para los menores de hasta 11 años y de 100 para aquellos a partir de 12. Sin embargo, el número de casos graves “es muy bajo”, y las tasas de hospitalización están “cercanas al 0%”. La edad media de las personas que se infectan sigue estando entre 37 y 38 años en el total de la epidemia, y baja a entre 35 y 36 en el último mes.

En su informe de ayer, Sanidad también actualizó la información referida a los brotes: desde que finalizó la desescalada hasta el miércoles a las 12.00 horas, se han comunicado 2.463 con alrededor de 25.700 casos. Y de ellos, 687, con 5.300 casos, han sido comunicados desde el 20 de agosto. Casi ocho de cada diez de estos episodios, el 77%, son de pequeña magnitud, con menos de 10 casos; aquellos más grandes, algunos incluso con más de 100, se producen en ámbitos de ocio, entre trabajadores en situaciones de vulnerabilidad y en centros socio-sanitarios.