No lo tenía sencillo Elixabete Etxanobe tras coger el relevo a Unai Rementeria como cabeza de lista del PNV en Bizkaia, territorio en el que los jeltzales consiguieron hace cuatro años unos resultados más que importantes, rozando la mayoría absoluta. La candidata tuvo el debut esperado, ganando en las urnas, aunque no con el empuje deseado.

En total, su candidatura consiguió 23 junteros, dos menos que en 2019. De hecho, por el camino se quedaron unos cuantos votos y, por ende, eso se reflejó en el porcentaje de voto. Si hace cuatro años, el PNV superó el 43%, este domingo se quedó varios puntos por detrás de ese porcentaje. Con todo, la victoria fue holgada, sobre todo viendo lo sucedido en otros territorios.

En segundo lugar volvió a quedar EH Bildu, aunque la coalición terminó la noche más que satisfecha. No en vano, si hace cuatro años se quedó a 15 junteros del PNV, ayer redujo esa diferencia a 8. En este sentido, la candidatura liderada por Iker Casanova pasó del 19,69% de los votos escrutados a rondar el 25%. A partir de ahí, no hubo movimientos en el tercer puesto, que volvió a ser para el PSE. El PP recuperó algo de presencia con un juntero más, pasando a ser cuarta fuerza, puesto que Elkarrekin Podemos bajó a la quinta posición, después de dejarse por el camino cuatro representantes en las Juntas Generales.

Ahora será el momento de llegar a acuerdos y pactos, pero Etxanobe tiene todas las cartas en su mano para retener la Diputación, que podría garantizarse la mayoría absoluta si se reedita la alianza con los socialistas. Con todo, en el conjunto del territorio vizcaíno, la subida de EH Bildu tuvo su reflejo en municipios importantes, siguiendo la tendencia general.

Aburto repite victoria

A pesar de que algunas encuestas incluso apuntaban a la posibilidad de llegar a la mayoría absoluta, Juan Mari Aburto se quedó al final a tres concejales de ese límite. Con todo, con doce ediles dobló a la segunda fuerza, EH Bildu –con seis–. No hay duda de que el actual alcalde de la capital vizcaína cuenta con un amplio respaldo de la ciudadanía, siendo una de las mejores noticias de la jornada para el PNV, a pesar de que perdió presencia en la Casa Consistorial (tenía 14 representantes) y número de votos.

Aunque el dominio de Aburto volvió a quedar demostrado en las urnas y a pesar de que en Bilbao no hubo lugar a sorpresa, lo cierto es que ni siquiera los propios análisis internos de EH Bildu preveían los buenos resultados obtenidos por María del Río.