- La república se impondría masivamente en Euskadi y Catalunya en un hipotético referéndum entre este modelo o la permanencia de la monarquía. La mayor encuesta realizada hasta la fecha en este ámbito, encarga por la Plataforma de Medios Independientes, toda vez que el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) se niega a preguntar a la ciudadanía al respecto, señala que el apoyo a un cambio en favor del republicanismo tendría un apoyo superior al 60% en el conjunto de la CAV y Nafarroa -ya que los resultados de los dos territorios aparecen agrupados en el estudio-, mientras que en Catalunya alcanzaría un respaldo del 66,5%, con solo un 14,6% decantándose por la monarquía, y el resto no sabe qué votaría, lo haría en blanco o no acudiría a las urnas. En el conjunto del Estado también se impondría dar carpetazo al actual régimen, ya que el 40,9% apoyaría la república frente a un 34,9% que desearía permanecer bajo los designios de la actual Corona, dejando en manos del 12,9% de indecisos la opción de modificar el actual estatus. El sondeo se ha realizado en base a 3.000 entrevistas en todo el territorio español entre los pasados días 21 de septiembre y 5 de octubre, en plena efervescencia sobre la actual Casa Real.

Eso sí, el informe refleja que, probablemente por la campaña que se organizaría, la sociedad cree que el referéndum sería ganado por la monarquía. El 38,7% de la población piensa que se mantendría la jefatura del Estado, mientras que un 31% cree que las urnas abrirían el paso a un Gobierno republicano. Asimismo, la república sería la opción más votada, aunque con menor margen, en el Principado de Asturias. En Galicia, la diferencia es de apenas un punto a favor del voto republicano, mientras que las comunidades de Andalucía, Madrid y, en menor medida, el País Valenciano, votarían a favor de la monarquía.

Sobre la conveniencia o no de realizar un referéndum, un 47,8% responde a favor, un 36,1% no lo ve necesario y un 16,1% de los ciudadanos del Estado no se pronuncia. En cuanto a qué tipo de república elegirían, un 48,5% se decantaría por una república presidencialista.

A la pregunta de si el rey Felipe VI debería llevar a cabo transformaciones en la institución y ser juzgado por sus actos, en clara alusión a si debería serlo el emérito, un 52,4% se muestra de acuerdo; un 25,5% bastante de acuerdo; un 8,2% poco de acuerdo; y un 6,1% nada de acuerdo. La satisfacción media a nivel estatal por el funcionamiento de la monarquía es de un 4,6 sobre 10, pero en Catalunya se sitúa en un 2,9, el valor más bajo, seguido del 3,1 de Euskadi y Nafarroa. En cambio, en Andalucía, Madrid y Valencia la nota supera el 5.

Igualmente en Catalunya, donde la presencia del rey en los últimos actos institucionales ha sido objeto de discusión, solo la Iglesia católica obtiene peor valoración que la monarquía, que en el conjunto del Estado obtiene ligeramente mejor puntuación que los partidos, los sindicatos o el Parlamento. Además, mientras que el actual rey, Felipe VI, obtiene un 5,8 de valoración media, los catalanes lo suspenden claramente, con un 3,6. Su padre, el rey emérito Juan Carlos I, cae hasta el 1,9, pero también suspende en el conjunto del Estado, con un 3,3.

Después de sus últimas actuaciones, en las que se ha cuestionado la neutralidad de Felipe VI, la encuesta realizada por el Instituto Opinión 40dB señala que un 41,5% de los interpelados ubican al monarca en el espectro más conservador de la política; un 29% coloca a Felipe VI en la derecha y un 12,5% lo hace en la extrema derecha. Un 31,8% de los encuestados creen que el rey es de “centro” o que “no tiene ideología”, mientras que un 20,7% asegura no saberlo. Solo un 6% sitúa al jefe del Estado en la izquierda.