- Después de las reticencias con el plan de regreso a las aulas que hizo públicas Podemos el pasado martes, la titular de Educación Isabel Celaá aseguró que no le constan dichas críticas de lo morados y explicó que el vicepresidente segundo Pablo Iglesias no habló con ella en el Consejo de Ministros sobre la reapertura de los centros educativos. En cualquier caso, Celaá dijo que no se dejará “distraer” con las polémicas entre socios de Gobierno porque tiene “mucho trabajo”.

Desde Unidas Podemos hicieron público su malestar con la vuelta a los colegios y su desencuentro con el departamento de Educación por la “falta de liderazgo” de la ministra en la preparación del inicio del curso escolar. Celaá asegura en cualquier caso que estas quejas no le han sido trasladadas en persona por los ministros de la coalición morada. En medio de este embrollo, el sindicato de estudiantes anunció ayer una huelga de tres días en septiembre y solicitó a Pablo Iglesias y a los miembros de Unidas Podemos en el Gobierno que respalden la convocatoria si es que realmente discrepan del plan para reabrir las aulas.

Por su parte, la ministra de Educación indicó en una entrevista en la Ser que todo el Ejecutivo español “trabaja en la misma dirección” para que el inicio del curso en septiembre se desarrolle con seguridad. Sin embargo, en Podemos exigen que los 2.000 millones de euros del fondo Covid prometidos a las comunidades para educación se destinen exclusivamente a la contratación de nuevo profesorado y a alquilar o acondicionar espacios que permitan desdoblar las clases y, de esta manera, se reduzcan los ratios de alumnos. A este respecto, la socialista Isabel Celaá indicó que dicho fondo fue aprobado “por la totalidad del Consejo de Ministros” y que las competencias en la materia están transferidas a las comunidades desde hace décadas.

A pesar de las críticas vertidas por Podemos, la ministra indicó que mantiene una buena relación con todos los compañeros de Gobierno aunque señaló que, “obviamente”, está compuesto por dos partidos políticos “con distintos acentos”. “Pero lo importante es servir a la ciudadanía, eso es lo importante, ser leal a la ciudadanía”, concluyó Celaá, dando por enterrada la polémica.

Sin embargo, una huelga de alumnos anunciada para el próximo mes amenaza con seguir creando tensión entre los dos partidos de Gobierno. El Sindicato de Estudiantes, convocante de la protesta, reclamó ayer expresamente a Pablo Iglesias y a los ministros de Unidas Podemos que se posicionen sobre la convocatoria y la respalden para oficializar su desacuerdo con el departamento de Educación.

Para el Sindicato de Estudiantes, sería “importante”, en este sentido, que “los ministros de Unidas Podemos” y, especialmente, el vicepresidente segundo Pablo Iglesias, salgan a defender el modelo público y presencial de escuela, y a solidarizarse con la situación de desamparo que a su juicio sufren los alumnos. “Deben colocarse a nuestro lado”, apuntan desde la central estudiantil.