madrid - Si bien el PP se adelantó algunas horas a sus compañeros constitucionalistas a la hora de pedir la inhabilitación del president Quim Torra. Condenado a un año y medio por hacer oídos sordos a un orden de la Junta Electoral Central (JEC) para que retirase de la fachada de la Generalitat la pancarta por la libertad de los presos políticos y el lazo amarillo, Vox y Ciudadanos se sumaron ayer a esa petición y reclamaron que Quim Torra sea despojado de su cargo a la mayor celeridad posible. Lo harán mañana mismo ante la JEC, a la que instarán a ejecutar "la decisión del TSJC que inhabilita a Torra", pese a que la sentencia aún no es firme y el president puede presentar recurso ante el Tribunal Supremo.
La líder de C's en Catalunya, Lorena Roldán, afirmó que Torra, al que acusó de "desprestigiar las instituciones, utilizándolas como el tablón de anuncios del separatismo, está inhabilitado "desde el minuto uno" de su llegada a la Generalitat, una atalaya desde la que tan solo viene buscando generar "enfrentamiento" entre los catalanes. "Además de estar inhabilitado políticamente, también lo está judicialmente por desobediencia", abundó Roldán, para posteriormente reclamar al president, condenado a un año y medio por desobediencia, que se marche "cuanto antes". Cuestionada por un posible adelanto electoral en suelo catalán, la dirigente naranja aseguró que no pillará a las bases de Ciudadanos sin los "deberes hechos" de cara a una convocatoria, ya que su partido es el único capaz de gestionar "la Catalunya real".
Vox, que ejerce la acusación popular en el caso, realizará mañana una maniobra similar con la presentación de un escrito en la Sala Penal y Civil del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) la ejecución "de inmediato de la inhabilitación" del president bajo el argumento de que "concurre la causa de ineligibilidad sobrevenida" y apela al artículo 6.2 b) de la Ley orgánica de régimen Electoral.
