El actual presidente de la República de Italia, Sergio Mattarella, ha anunciado este martes la creación de un Ejecutivo institucional apoyado por todas las fuerzas políticas hasta salir de la crisis. Para comandar dicho encargo, el elegido ha sido el expresidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi. Este extremo en la política italiana viene dado por la imposibilidad de reeditar un Ejecutivo, y por la cercanía de un abismo institucional debido a la crisis.

Mattarella ha comparecido sobre las nueve de la noche para dar a conocer la imposibilidad de formar un gobierno político en Italia. El anterior gobierno, formado por cuatro partidos, no han logrado ponerse de acuerdo durante las negociaciones de casi 72 horas. Renzi rompió el acuerdo, algo esperado, con lo que se ha pasado al plan de emergencia en el que el banquero será la cabeza al mando de un Ejecutivo de emergencia hasta que la situación se estabilice y puedan realizarse unas nuevas elecciones. Draghi pide apoyo a todas las fuerzas políticas y alega que intentará "dar el encargo lo antes posible".

El banquero es una de las pocas figuras que logra un consenso unánime entre los partidos políticos en los que se incluye la derecha italiana, que estaría dispuesta a apoyar dicho Ejecutivo.

Fondo europeo

Mattarella durante la comparecencia recordó que en abril Italia debe presentar en la Comisión Europea el plan para la utilización de los fondos europeos. El jefe de estado espera que ese dinero se pueda usar antes de la fecha para regular la situación en el país. "No podemos permitirnos perder esta ocasión fundamental para nuestro futuro", sentenció Mattarella.