El presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, aseguró este miércoles que condena "inequívocamente" la violencia de la semana pasada, cuando sus seguidores irrumpieron en el Capitolio, en un discurso a la nación en el que no mencionó el juicio político aprobado en el Congreso.

"Quiero ser muy claro. Condeno inequívocamente la violencia que vimos la semana pasada. La violencia y el vandalismo no tienen absolutamente ningún lugar en nuestro país", subrayó Trump en un mensaje a la nación sin aludir al juicio político en el que precisamente se le acusa de "incitación a la insurrección" por el asalto de la semana pasada al Capitolio.

En referencia a sus partidarios, apuntó que "hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande siempre ha consistido en defender el Estado de derecho, apoyar a los hombres y mujeres de las fuerzas del orden, hacer cumplir y defender las tradiciones y valores más sagrados de nuestra nación". "La violencia de las turbas va en contra de todo en lo que creo", subrayó al asegurar que ninguno de sus seguidores podría "faltar el respeto a la ley o a nuestra gran bandera estadounidense". "Si haces cualquiera de esta cosas -advirtió-, no estás apoyando nuestro movimiento".

LA GUARDIA NACIONAL ANTE POTENCIALES AMENAZAS

En ese contexto, consideró que se han visto "demasiados disturbios, demasiadas turbas, demasiados actos de intimidación y destrucción", y llamó a quienes lo propician a detenerse, sea de izquierda o de derecha.

"Ahora les pido a todos los que alguna vez han creído en nuestra agenda que piensen en formas de aliviar las tensiones, calmar los ánimos y ayudar a promover la paz en nuestro país", agregó.

También afirmó que ha sido advertido por el Servicio Secreto de "amenazas potenciales", debido a manifestaciones que han sido convocadas para los próximos días en Washington y otras zonas del país con motivo de la ceremonia de traspaso de mando el próximo miércoles.

"He ordenado a las agencias federales que utilicen todos los recursos necesarios para mantener el orden en Washington. Estamos trayendo miles de miembros de la Guardia Nacional para asegurar la ciudad y garantizar que la transición pueda ocurrir de manera segura y sin incidentes", anticipó.

Trump dejará la Casa Blanca el próximo miércoles 20 de enero, día en el que está prevista la ceremonia de investidura de su sucesor, el demócrata Joe Biden, a la que el actual mandatario ha anunciado que no asistirá.

Igualmente, Trump aprovechó para criticar, sin abundar en detalles, los "esfuerzos de cancelación y censura", en una tácita alusión a las medidas adoptadas por distintas plataformas y redes sociales que han suspendido sus cuenta y de algunos de sus seguidores radicales por considerar que sirvieron para incitar la violencia en el Capitolio, que causó cinco muertos.

"Hoy hago un llamado a todos los estadounidenses para que superen las pasiones del momento y se unan como un solo pueblo. Elijamos seguir adelante unidos por el bien de nuestras familias, nuestras comunidades y nuestro país", concluyó Trump.