Una llamada de un antiguo alumno puso todo en marcha.
El director Dario habló con Sergio, que hacía diez años que había terminado allí sus estudios, y empezó toda la cadena de solidaridad desde Vitoria para intentar ayudar a los vecinos de Valencia lo antes posible.
Esta semana la entrada principal del colegio Niño Jesús se ha convertido en el punto donde muchas familias de la capital alavesa se han volcado, superando las expectativas y llenando de cajas el pasillo.
Cajas que el viernes por la tarde recogerá Sergio. Porque junto a tres amigos, Patricia, Blanca y Yerai, viajará a Valencia.
Llevarán un camión cargado de alimentos para bebés como leche en polvo y potitos, productos de higiene para los más pequeños como pañales y toallitas, además de palas, botas, cubos, linternas, velas, mascarillas y guantes de latex".
Estos cuatro amigos de Vitoria lo han tenido claro desde el minuto uno. Tienen que estar donde hace falta estos días, que es en Paiporta, Catarroja,...
Desde que fueron conscientes hace unos días de la magnitud de la tragedia que ha golpeado a miles de vecinos y vecinas de Valencia, no lo dudaron.
"Ya tenemos el contacto allí para poder pasar los controles sin problema, y depende del material que necesiten nos asignarán una u otra localidad", explica Sergio.
"Saldremos de madrugada el sábado para Valencia"
La idea de estos cuatro amigos de Vitoria es salir sobre las tres de la mañana el sábado. El viernes por la tarde cargarán el camión con todo el material recogido.
Todo lo que la gente quiera donar está siendo recogido en dos puntos de Vitoria hasta el viernes por la tarde: el bar Akor Lounge en calle Fueros 26, y el colegio Niño Jesús.
Con la iniciativa que han puesto en marcha estos cuatro amigos también colaboran dos empresas: Servipienso y Ullibarri Distribución y Construcción.
"Esta empresa hará descuentos a todos los clientes que compren material como palas, botas y cubos para llevar a Valencia", explica Sergio.
Además, trasladarán parte del material de una hostelera de Vitoria. "Está recogiendo tanto que en el bar ya no le entraba y ha tenido que alquilar un pabellón parar guardarlo antes de llevarlo a Valencia".