La micropigmentación del complejo de areola mamaria-pezón estará incluida a partir de diciembre en la cartera de prestaciones de Osakidetza con lo que las mujeres mastectomizadas podrán completar el proceso de reconstrucción de la mama en la sanidad pública vasca.
DONOSTIA. El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha hecho este anuncio en Donostia en un acto celebrado en Onkologikoa, donde se ha reunido con responsables del programa que forma a las enfermeras encargadas de realizar esta técnica, que completa la reconstrucción de la mama tras la intervención quirúrgica.
Urkullu, quien ha estado acompañado por la consejera de Salud, Nekane Murga, ha destacado "la trascendencia física, psicológica y anímica" que el proceso de micropigmentación reviste para las mujeres mastectomizadas en la medida que "marca de manera simbólica la transición de paciente a superviviente".
En Euskadi, unas 1.500 mujeres son diagnosticadas anualmente de cáncer de mama, de las cuales entre un 20 y un 30 % requiere ser sometida a una mastectomía lo que significa que en torno a 300 podrían beneficiarse cada año de esta nueva prestación.
La puesta en marcha de esta técnica ha requerido una fase de formación específica previa, que comenzó en septiembre, para las enfermeras que se encargarán de realizar esta técnica en el Servicio Vasco de Salud.
El lehendakari ha enmarcado esta medida en el principio de humanización de la atención oncológica que inspira la acción de la sanidad vasca a través también del Plan Oncológico de Euskadi 2018-2023, cuyo objetivo es mejorar la supervivencia del cáncer y la calidad de vida de los pacientes.
Ha recordado que en el caso del cáncer de mama, el programa vasco de detección precoz ha contribuido a disminuir notablemente la mortalidad y a mejorar la calidad de vida de las mujeres afectadas.
En concreto, desde que se puso en marcha en 1995 y hasta junio de este año, Osakidetza ha realizado más de 2,6 millones de citaciones y 2,1 millones de mamografías lo que ha permitido la detección de 9.916 cánceres, en su mayoría en estados precoces.
Además, el 83,4 % de las mujeres recibió un tratamiento conservador no invasivo de la mama, un porcentaje que es superior cada año y que supone un gran avance, según ha recalcado el lehendakari.