Nueva York - La Oficina del Médico Forense de Nueva York confirmaba ayer la muerte del magnate financiero, Jeffrey Epstein, hallado colgado en su celda en una cárcel federal en Nueva York, donde permanecía acusado de haber dirigido durante años una trama pedófila para explotar sexualmente a menores. El millonario estadounidense de 66años, que alardeaba de ser amigo de grandes personalidades políticas y artistas -como Donald Trump, Bill Clinton, los príncipes Carlos de Inglaterra y el saudí Mohammed bin Salmán, o Woody Allen- también fue hallado inconsciente el pasado 23 de julio cuando intentó suicidarse, pero que llegó a culminar ayer, según declararon fuentes oficiales a The New York Times. La oficina de comunicaciones del Forense confirmó su muerte y está investigan el caso para determinar que si se trató de un suicio, como apunta la prensa.
Su cuerpo fue encontrado a eso de las 7.30 de la mañana (hora local) y poco antes los servicios de emergencias habían recibido una llamada acerca de un posible paro cardíaco.
Epstein, detenido el pasado 6 de julio al aterrizar su avión en el vecino estado de Nueva Jersey, y cuyo juicio estaba previsto para el próximo año, se había declarado no culpable de las acusaciones, pero ya se enfrentó a cargos de este calibre en Florida. Esptein era un presunto pedófilo en serie acusado de abusar durante años de decenas de niñas pero que consiguió no estar incluido en la lista negra del Me Too. Un supuesto depredador sexual que quedó impune pese a la montaña de evidencias que había en su contragracias a su mucho dinero, mucho poder y mucha ayuda. En 2008 alcanzó un acuerdo extraoficial con la Fiscalía para que se cerrara la investigación, que lo podía haber enfrentado a una cadena perpetua. Las víctimas no supieron de esas negociaciones hasta cerca de un año después que el acuerdo fuera firmado.
El entonces fiscal de Florida, Alexander Acosta, fue nombrado luego secretario del Trabajo por el presidente Trump pero tuvo que renunciar al cargo el pasado enero en medio del escándalo que suscitó el acuerdo con Epstein, que está siendo revisado por el Departamento del Trabajo. Su muerte se produce después de que el pasado viernes un juez de la Corte de Apelaciones de Manhattan ordenara la publicación de cientos de documentos sobre Epstein, que pertenecían a un caso paralelo cerrado contra una mujer que era supuestamente su “reclutadora”.
La mujer es, Ghislaine Maxwell, de la alta sociedad británica y socia cercana de Epstein, a quien una supuesta víctima del magnate, Virginia Giuffre, demandó en 2015 por difamarla al decir que eran mentira sus alegaciones de que el empresario había traficado sexualmente con ella por su participación como “madame”.
Un juez federal ordenó este pasado julio que salieran a la luz unas 2.000 páginas relacionadas con Epstein a raíz de ese caso, que se mantenían en secreto desde que se cerró en 2017, pero Maxwell apeló la decisión, lo que ha llevado a un retraso en la publicación de los documentos hasta este viernes, cuando se desestimó la solicitud.
El 15 de julio, en una audencia sobre fianza, Epstein indicó a la corte que estaba dispuesto a pagar hasta 100 millones de dólares para salir de prisión. La Fiscalía, que se oponía a la fianza, presentó a dos testigos, quienes pidieron al juez que no impusiera fianza al millonario y aseguraron, sin entrar en detalles, que fueron víctimas de abuso sexual por parte de Epstein cuando tenían 16 y 14 años. Dos días después, la corte le negó la fianza al financiero. - Efe