Roma - El Gobierno italiano defendió sus Presupuestos para 2019, que prevén ampliar el gasto público, y dijo que sus previsiones han sido “una decisión difícil pero necesaria”, en la carta enviada a la Comisión Europea (CE) y difundida ayer. “El Gobierno italiano es consciente de haber elegido una dirección de la política presupuestaria que no está en línea con las normas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento. Ha sido una decisión difícil pero necesaria a la luz del persistente retraso en la recuperación”, se lee en la misiva.
En ella, el ministro de Economía, Giovanni Tria, ofrece explicaciones sobre las cifras que causan preocupación a Bruselas, como un elevado déficit, y desea que sean “suficientes” para calmar los temores.
Tria asegura que el Presupuesto para el próximo año “no expone a riesgos la estabilidad financiera de Italia ni la de otros países de la Unión Europea”. “De hecho, creemos que el reforzamiento de la economía italiana va en interés del conjunto de la economía europea”, agrega la carta. La CE ha advertido a Roma de que su borrador de cuentas para 2019 supone un “incumplimiento particularmente serio” de las normas comunitarias por el aumento del gasto y la deuda públicos que prevé. Tria tranquiliza a la Comisión señalando que el Ejecutivo tomará medidas si sus predicciones sobre el impacto de estas cuentas no se cumplen. “Si la relación entre el déficit y el PIB y la deuda y el PIB no evolucionan en línea con el plan, el Gobierno se compromete a intervenir, tomando las medidas necesarias para que los objetivos indicados se respeten rigurosamente”, subraya el titular de Economía. El Ejecutivo italiano formado por el Movimiento Cinco Estrellas y la Liga ha fijado un objetivo de déficit para el año que viene del 2,4% del producto interior bruto (PIB), el triple de lo estimado por el anterior Gobierno, que pronosticó que sería del 0,8% para 2019.
Fomentar el crecimiento El Ejecutivo italiano argumenta que quiere alzar el gasto público para poder aplicar promesas electorales que, según pronostica, fomentarían el crecimiento económico de Italia en un 1,5% del PIB para el próximo año, alejado del 1% que prevé el Fondo Monetario Internacional para el país. La CE confirmó ayer que había recibido la respuesta del Gobierno italiano tras advertir a Roma en una carta el jueves pasado de un “incumplimiento particularmente serio” en su borrador de presupuestos para 2019. “Puedo confirmar, efectivamente, que la respuesta de las autoridades italianas acaba de llegar”, declaró el portavoz jefe de la Comisión Europea (CE), Margaritis Schinas, durante la rueda de prensa diaria de la institución.
Añadió que el colegio de comisarios europeos, en su reunión del martes, analizará la situación y determinará qué pasos dar.
Las normas europeas permiten que la Comisión rechace un borrador de presupuesto cuando hay un incumplimiento grave y que pida uno nuevo al país en cuestión, una situación que hasta ahora nunca se ha dado. En la misiva del jueves enviada desde Bruselas a Roma, la CE pedía explicaciones sobre las “razones” por las que se planea “un desvío significativo obvio con respecto a las recomendaciones” que se le hicieron dentro del Pacto de Estabilidad y Crecimiento.
El líder del Movimiento 5 Estrellas (M5S) y vicepresidente de Italia, Luigi Di Maio, ya adelantó el domingo que la carta dirigida a la Comisión Europea para responder a las dudas sobre sus presupuestos defendería ese dato. “La carta de mañana explicará las razones de nuestros presupuestos y dirá que (...), con la deuda que nos han dejado los anteriores gobiernos y una ralentización del crecimiento, el déficit para este año será del 2%, por lo que solo aumentaremos un 0,4% el próximo”, explicó en la televisión pública italiana. - Efe
Líder en déficit. España registró el mayor déficit público (3,1 % de su PIB) entre los países de la Unión Europea (UE) en 2017, informó ayer Eurostat, la oficina de estadística comunitaria, a partir de la segunda provisión de datos facilitada en 2017. Solo dos Estados miembros de la Unión, Portugal (3%) y España, anotaron un déficit público igual o superior al 3% del PIB en 2017, mientras que trece países marcaron superávit en el mismo ejercicio.
Sexto puesto en deuda. El reino de España ocupa la sexta mayor deuda pública (98,1% del PIB) de todos los países de la UE en 2017. Hasta quince Estados miembros superaron la tasa del 60% del PIB, por lo que situaron este indicador por encima de la marca fijada en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento de los Veintiocho. Únicamente Grecia (176,1% de su PIB), Italia (131,2%), Portugal (124,8%), Bélgica (103,4%) y Francia (98,5%) registraron una deuda pública superior a la española.