- Los últimos movimientos del socialismo para procurarse el apoyo de Unidos Podemos al techo de gasto no están provocando un rechazo abierto en el PNV, ni a los jeltzales les suena necesariamente mal la reforma fiscal que están planteando. Fuentes de la Ejecutiva jeltzale aseguran que nadie ha contactado aún con ellos para abordar este asunto, pero puntualizan que están “dispuestos a hablar”. Será uno de los asuntos que aborden en la ejecutiva del partido a la vuelta de las vacaciones, el día 31. Este anuncio es importante porque el PNV fue el único partido que se sumó al socialismo en la votación de julio para aprobar el techo de gasto. Ningún otro socio de la moción de censura lo hizo. El presidente español, Pedro Sánchez, está contactando con los grupos para un segundo intento. El techo de gasto fija el marco de recursos con los que contará el Estado el próximo año y es el paso previo a la presentación de los Presupuestos en septiembre, aunque es legalmente posible registrar las Cuentas sin tener un techo de gasto aprobado.

Unidos Podemos ha enviado una propuesta al PSOE para que el tipo mínimo en el Impuesto de Sociedades sea del 15%, y también para fijar una tasa para la banca, entre otras medidas. Con estos ingresos, podría sostenerse el sistema de pensiones y un mayor gasto en educación y sanidad. El PNV no entra por ahora en casuísticas sobre las medidas que le agradan en mayor o menor medida. “Hay que observar en su globalidad todas las que se propongan. Si nos llaman, hablaremos. No nos asusta hablar de fiscalidad”, sostienen.

Hasta la fecha, cuando se han abordado cuestiones relacionadas con la fiscalidad en el Congreso, el PNV se ha abstenido porque la comunidad tiene autonomía en este ámbito en virtud del Concierto Económico, que le permite fijar su propio Impuesto de Sociedades e IRPF y recaudarlo a través de las diputaciones. Teniendo en cuenta que el PNV asiste a estos debates en Madrid como mero espectador porque no afectan a Euskadi, un cambio fiscal no sería motivo para que votara en contra del techo de gasto, sino que simplemente puede no aplicar ese impuesto. En el caso del impuesto a la banca, sí afectaría a las entidades vascas. Las fuentes consultadas no entran en detalles. Solo dicen que “hay cosas que pueden ser interesantes para trasladarlas al régimen foral, y otras no; hablaremos”.

Sánchez, que confía en aprobar su techo de gasto en septiembre, necesita a Unidos Podemos, Compromís, PNV, PDeCAT y ERC. Aunque el Congreso lo aprobara, el Senado tiene que ratificarlo y tiene derecho a veto. Casado ya adelantó ayer que el PP va a ejercerlo porque rechaza una subida fiscal.