BILBAO. En declaraciones, Erkoreka ha afirmado que el documento pactado entre jeltzales y la coalición soberanista "se sitúa en la primera fase de un proceso de revisión estatutaria" que el PNV y el PSE-EE tienen "programado en el acuerdo de coalición desde hace dos años".
En este sentido, ha asegurado que este primer texto sobre las bases del nuevo estatus acordado entre PNV y EH Bildu --que incluye el derecho a decidir, la bilateralidad con el Estado y el reconocimiento de Euskadi como nación, entre otras cosas-- "tiene que ir necesariamente sucedido por otras actuaciones, por la intervención de un grupo de juristas que le dará forma articulada, que hará sugerencias y planteamientos desde el punto de vista del acomodo de estos principios al ordenamiento jurídico".
Asimismo, ha recordado que los propios portavoces de los grupos del Parlamento Vasco han afirmado que, en una fase posterior, "buscarán ampliar consensos y ensanchar la tienda de campaña" ahora construida, "de manera que en los acuerdos pueda integrarse un mayor número de partidos desde una perspectiva incluyente".
"Por lo tanto, yo tampoco le daría a eso más trascendencia al acuerdo alcanzado ahora. El Parlamento Vasco es el foro en el que se está produciendo el debate del autogobierno futuro y el autogobierno lo están ejerciendo el Parlamento y el Gobierno vasco, que operan en el marco reconocido, en el del Estatuto de Gernika", ha apuntado.
En este sentido, ha manifestado que, cuando el actual texto estatutario se reforme, "el marco será otro, y en tanto en cuanto esa modificación no se produzca, se operará en el marco vigente".
En todo caso, considera que "el hecho de que se abra un debate de cara al futuro entre formaciones políticas y que cada una, con absoluta libertad, haga su planteamiento, formule su propuesta y, en ese contexto plural, se empiecen a articular algunos acuerdos o algunas aproximaciones, es expresión de la libertad democrática y del libre funcionamiento de las instituciones en un marco democrático".
Según ha recordado, "todavía el camino que tiene que recorrer el proceso de reforma del autogobierno es largo", y ha destacado "el esfuerzo de aproximación" realizado por PNV y EH Bildu "para esbozar un primer texto que puede servir de guía a las intervenciones futuras de comisión de expertos jurídicos y de los propios órganos del Parlamento".
"EN EL MARCO CONSTITUCIONAL"
A su juicio, este "esfuerzo" es la "confirmación" de que el texto de nuevo estatus "intenta encuadrarse en el marco constitucional". Además, ha aludido a las "numerosas referencias a la Constitución" que hace el documento.
"Se busca un acomodo de Euskadi en un marco constitucional definido en torno a los derechos históricos de la Constitución española de 1978, y hay sí veo yo un esfuerzo de enganche con el marco constitucional que, en el caso de EH Bildu, es inédito, no tiene precedentes. Jamás antes le habíamos visto suscribiendo un planteamiento de esta naturaleza", ha añadido.
También cree que hay "una cierta voluntad de integración entre las formaciones políticas" que participan en el debate porque en la ponencia de autogobierno "continúan todas las formaciones políticas, ninguna se ha desmarcado ni dado de baja".
"Todos son conscientes de la importancia que entraña alcanzar un consenso importante de cara al autogobierno futuro y, yo, como miembro del Gobierno, no puedo nada más que expresar la confianza en las instituciones y transmitir mi convicción de que las formaciones políticas, conscientes de la relevancia del papel que tienen entre manos, serán capaces, con altura de miras, de hacer un esfuerzo de búsqueda de consenso para poder alumbrar lo antes posible un marco de autogobierno futuro", ha indicado.
En este sentido, ha recordado que el actual texto estatutario "ha desempeñado un gran papel, pero, como texto jurídico, ha empezado a estar obsoleto".
Preguntado por si contempla el Gobierno Vasco la posibilidad de que salga un nuevo estatus solo con acuerdo de los nacionalistas, ha recordado que el Ejecutivo "tiene establecido, en el propio acuerdo de coalición (PNV-PSE), el compromiso con el máximo consenso" en la reforma estatutaria.
Además, ha subrayado que el trabajo en la ponencia de autogobierno empezó con "un documento de bases y principios" en el que se establecía ese "objetivo máximo para guiar este proceso". "El Gobierno opera en este esquema y espera que ese consenso se pueda alcanzar, si no en la fase inicial, en la final", ha explicado.
De esta forma confía en "el compromiso de todas las formaciones políticas" para que "se impliquen lo más activa y más comprometidamente posible, haciendo aportaciones, cesiones y aproximando posiciones". "No será el Gobierno el que diga lo que tiene que hacer al Parlamento, pero sí expresa su deseo de que el resultado final sea fruto del máximo consenso posible", ha reiterado.
Josu Erkoreka ha señalado que el debate sobre el derecho a decidir y el reconocimiento de Euskadi como nación "no estaba fuera de las previsiones Gobierno de coalición". Por tanto, ha considerado que "no hay nada que pueda perturbar el buen funcionamiento del Gobierno porque todo estaba previsto y asumido".
RECURSO EN EL TC
Asimismo, ha indicado que se verá, a lo largo del proceso de elaboración del texto estatutario, "si realmente hay algún planteamiento contrario al ordenamiento jurídico, que aflorará y se debatirá, pero planteamientos contrarios al ordenamiento jurídico ha habido en otros estatutos que han sido impugnados ante el Tribunal Constitucional y que han provocados sentencias" porque puede haber, al respecto, "posiciones discrepantes".
"El derecho no son matemáticas, hay mucho de valoración, de apreciación de un precepto jurídico y las posiciones distintas se resuelven en los tribunales", ha remarcado, para puntualizar que "no hay nada dicho de manera definitiva".
EL PP Y LOS PRESUPUESTOS
El portavoz del Ejecutivo vasco también se ha referido a las cuentas públicas vascas para 2019 y ha apuntado que hablará con todos los partidos políticos "cuando defina su política presupuestaria" para formularles "la misma oferta".
Sobre la posición que mantendrá el PP --que facilitó que las cuentas de 2018 salieran adelante-- tras apoyar el PNV la moción de censura que aupó a Pedro Sánchez al Gobierno y tras el nuevo liderazgo de Pablo Casado en la formación popular, ha afirmado que le cuesta "mucho creer que al PP le interese transmitir a la ciudadanía una imagen de su actuación institucional en connivencia o en complicidad con formaciones como EH Bildu o como Podemos, que no apuestan precisamente por la estabilidad de las instituciones".
No obstante, ha subrayado que le corresponde al Partido Popular, "después de esta renovación que se ha producido en su seno", decidir "de qué manera quiere enfocar la política y de qué manera quiere que les perciban los ciudadanos".
"A mí, a priori, me cuesta creer que lo que más le conviene al PP, concretamente en Euskadi, sea operar como un antisistema, como una formación política que busca la inestabilidad de las instituciones, que hace coalición con las formaciones políticas de oposición alternativas o antisistemas para desestabilizar las instituciones y al Gobierno vasco, impidiendo la consecución de objetivos de política económica relacionadas con el crecimiento y la creación de empleo", ha concluido.