vitoria - Durante años, las autoescuelas han hecho de junio y julio su particular agosto. Son los meses en los que los universitarios y los recién graduados en bachillerato aprovechan para sacarse el carné de conducir. Pero este verano no será así. La huelga de los examinadores de la Dirección General de Tráfico (DGT) afecta tanto a las autoescuelas como a los propios alumnos, lo que ha supuesto que 2.832 vascos se hayan quedado sin poder sacarse el permiso de conducir. Los exámenes teóricos sí siguen con su funcionamiento habitual, mientras que el retraso en el examen práctico se acumula.

Desde que empezó la huelga el 19 de junio, en Bizkaia se han aplazado cerca de 2.000 exámenes prácticos y es que solo uno de los 14 examinadores que hay no secunda el paro. En Gipuzkoa, el paro es total y, por ello, sacarse allí el carné este verano resulta imposible, por lo que 576 alumnos se desplazan hasta Bizkaia para examinarse. En Araba resulta algo más fácil acabar el verano con la L, ya que dos de los tres examinadores trabajan aunque, aun así, son ya 240 los exámenes que se han suspendidos.

Los retrasos en los exámenes están a la orden del día en todo el Estado. Por ello, la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) ha pedido a los examinadores de Tráfico que pongan fin a su huelga por el “enorme perjuicio” que está causando desde hace semanas a los aspirantes a obtener el carné de conducir, ya que el conflicto está provocando un “tapón colosal” de retrasos de pruebas. Los paros empezaron el pasado 19 de junio y está previsto que dure hasta el 31 de este mes. Durante agosto se recuperará algunos de los exámenes aplazados, antes de que a partir del 4 de setiembre comience un paro total e indefinido.

Ante este panorama, la Asociación de Examinadores de Tráfico (Asextra) ha avanzado que el próximo 25 de julio se concentrarán ante la Dirección General de Tráfico para “protestar por los incumplimientos y engaños”. Esta concentración formará parte de las protestas y paros que vienen protagonizando desde el pasado mes de junio para solicitar el reconocimiento de la responsabilidad, los riesgos de accidentes y agresiones, además del trabajo a la intemperie que conlleva su trabajo y reivindicar un aumento de su complemento específico que, según aseguran, “fue prometido hace años y por tres directores generales distintos”.

El asunto es grave y las autoescuelas lo saben. Patricio Arriandiaga, gerente de Go, una de las autoescuelas más populares de Bizkaia desde que hace cuatro años empezara con el gancho de ser una autoescuela low cost asegura a DNA que la huelga de examinadores les está haciendo “mucho daño”. Asegura que los examinadores “están en todo su derecho” de secundar la huelga, pero “nosotros también tenemos derecho a trabajar”.

Movilizaciones en contra En algunas ciudades como Barcelona o Murcia, las autoescuelas han llevado a cabo movilizaciones, juntándose en la carretera y realizando pitadas en contra de la huelga, aunque en Bizkaia no parece que eso vaya a suceder. Patricio denuncia las diferencias que hay entre las autoescuelas y asegura que muchas ven esta situación como “una oportunidad” para “hacer que la competencia caiga”.

Los examinadores de tráfico piden principalmente un complemento salarial anual que supondría 2,5 millones de euros para todos los examinadores. Según Patricio, “el Gobierno no tiene mucha pinta de ceder ahí. Por varios motivos, primero porque no quiere soltar ese dinero y, segundo, porque este Gobierno tiende a privatizar, con lo cual, si dejan morir esto un poquito, luego es fácil decir que lo público va fatal”. Según asegura el portavoz socialista de Seguridad Vial, Pablo Bellido, “el Gobierno no lo soluciona porque no le da la gana”.

La huelga de examinadores pone en riesgo a cerca de 1.300 autoescuelas en todo el Estado y a los trabajadores de muchas de ellas. En la autoescuela de Patricio son 18 los trabajadores y no sabe si el año que viene va a poder mantenerlos. “Yo si la gente no da clases no recibo dinero y no sé si podré mantener toda la plantilla”, confiesa. “Hemos notado que el número de matrículas ha bajado porque, claro, si tu te vas a sacar el carné pero está la sombra de la huelga, pues igual no te lo sacas”, asegura. Aún así, el gerente de la autoescuela Go dice que “lo peor no es lo que hemos notado ya, sino lo que vemos que viene”. Y ese futuro no es precisamente optimista. “Si tenemos en cuenta que uno de los que negocia se ha ido de vacaciones, es que no se lo van a tomar muy en serio”, sentencia el gerente. Respecto a las alternativas que ha puesto el gobierno, como la de incluir militares en la plantilla, Patricio no lo ve “realista” y cree que “han sacado las ideas para mostrar que tienen recursos”. El Gobierno también ha mostrado la intención de abrir nuevas plazas a examinador. El presidente de la Confederación de Autoescuelas advierte de que disolver el “tapón” de alumnos llevará meses, aunque aseguran que las iniciativas van “en la dirección correcta”. Las autoescuelas no lo ven como una medida a corto plazo. “Al sacar ahora las plazas, el examinador se tiene que formar y, como muy pronto, podrá ejercer a mediados del año que viene, o finales”, sentencia el gerente de Go.

El propio presidente de la Cenae, José Miguel Báez, coincide en que “el proceso de selección y formación se dilatará como poco hasta bien entrado 2018 y durante este tiempo continuará el goteo de jubilaciones de examinadores, por lo que el esfuerzo no solucionará nada”. Además, considera insuficiente la oferta de 70 plazas de acceso libre para examinadores, pues es una cifra “similar” a la de los funcionarios que se jubilan este año.

La huelga al congreso El próximo martes puede ser el día que marque la dirección de la huelga. El director de la DGT, Gregorio Serrano, comparecerá en la Comisión de Seguridad Vial y Movilidad Sostenible en el Congreso de los diputados para informar sobre las medidas que va a llevar a cabo para poner fin a la situación de los examinadores. Durante la sesión, se incluirá la comparecencia del propio ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, a petición propia, así como una petición registrada esta semana por el PSOE en la que piden explicaciones al responsable de la DGT sobre la situación de los complementos en las retribuciones al colectivo examinador prometidos hace más de dos años.