MADRID. Moix renunció ayer a su cargo al frente de la Fiscalía Anticorrupción después de la polémica sobre su participación en una sociedad familiar radicada en Panamá.

En declaraciones a la Cadena Cope ha añadido que con su dimisión también intenta proteger a la institución "que puede estar sometida a vaivenes mediáticos".

Moix ha insistido en que la sociedad heredada de su padre está declarada, que no ha incurrido en "ninguna ilegalidad ni irregularidad" y que no existen incompatibilidades.

Ha repetido que la decisión de dimitir la ha tomado de forma voluntaria en contra del criterio del fiscal general del Estado, José Manuel Maza, "que no veía motivo ni razón".

El exfiscal jefe Anticorrupción ha manifestado que no quiere hablar de su vida privada pero ha reconocido que alguno de sus hijos ha tenido que escuchar "acusaciones fuertes" contra él y esto es lo que ha pesado a la hora de tomar la decisión de dimitir.