BILBAO. El llamado Grupo Internacional de Contacto ha hecho un llamamiento a los partidos y a los gobiernos de España y Francia para que "aprovechen la oportunidad" de la libertad de Arnaldo Otegi "como un catalizador para renovar esfuerzos y abordar de forma creativa los problemas pendientes relativos a las víctimas, las personas presas y el desarme".
En un comunicado, el grupo que lidera el abogado sudafricano Brian Currin ha saludado la libertad del dirigente de Sortu y ha confiado en que tras su puesta en libertad Otegi "continuará trabajando en favor de la paz".
"Siempre hemos reiterado que la detención, condena y encarcelación de Arnaldo Otegi hace más de seis años era contraproducente para el proceso de paz y una injusticia", ha opinado este grupo.
El grupo ha recordado que en el momento de su detención, anterior a la creación del Grupo Internacional de Contacto, "algunos de nosotros estábamos trabajando con el señor Otegi. Su agenda, así como la de la Izquierda Abertzale, estaba enfocada en conseguir el final de las actividades armadas de ETA y en el eventual decomiso de la armas de ETA. Esta es también la agenda del GIC".