- Pedro Sánchez avisó ayer de que quien vote no a su investidura como presidente del Gobierno estará votando sí a “la continuidad de Mariano Rajoy en el poder, y en particular se dirigió a Podemos, a quien exigió que no dé “lecciones” al PSOE. “Son tan de izquierdas que son capaces de votar en contra de un candidato del PSOE para que siga gobernando el PP”, censuró, obviando que su acuerdo con Ciudadanos supone desdeñar cualquier giro a la izquierda. Así se pronunció al inicio de una asamblea con militantes en Alcalá de Henares con el objetivo de explicar el pacto suscrito con Albert Rivera y defender el sí en la consulta a las bases.

Sánchez recalcó que el resultado del 20-D hace que en el Congreso la suma de las derechas sea mayor que el bloque de izquierdas, que tenía como “única opción” para gobernar apoyarse en los partidos independentistas. “La única opción que podíamos tener para poder ganar desde la izquierda es una de dos: o intentar plantear un acuerdo con el partido de Ciudadanos; o, dos, hacer descansar la gobernabilidad en partidos que quieren romper la unidad de España, ERC y Democracia y Libertad”, argumentó. Por eso, el líder del PSOE quiere sumar a las “fuerzas del cambio”, Ciudadanos y Podemos, para poner en marcha un gobierno “progresista y reformista” como el que, dice, defiende la fuerza naranja. A su vez, dijo haber sido “coherente” en los últimos dos meses porque anunció que no apoyaría la continuidad del PP y trataría de propiciar un gobierno de cambio y de progreso, que abriría a otras formaciones porque los socialistas no pueden hacerlo solos.

Aunque el consenso con Ciudadanos no lo recoge explícitamente, Sánchez insiste en que votar a favor de este acuerdo supone apoyar la derogación de la reforma laboral y la elaboración de un nuevo Estatuto de los Trabajadores, la revisión de los acuerdos con la Santa Sede y la aprobación de una ley religiosa y la paralización de la Ley Wert. Ahora, y pese a que Podemos, IU y Compromís se negaron a seguir negociando, el aspirante socialista emplazó de nuevo a todos los partidos para que “piensen en el bien común” y no en el propio y permitan que Rajoy no siga siendo el presidente del Gobierno español.

En paralelo, Rivera aseguró que si Sánchez no consigue ser investido como jefe del Ejecutivo y el rey propone a Rajoy para que intente formar gobierno, la formación naranja intentará “buscar puntos comunes” con ese candidato. En una entrevista a Antena 3, el líder de Ciudadanos destacó que “España tiene que tener gobierno, independientemente de quién sea el presidente”, pero también criticó al máximo dirigente del PP por haber declinado la primera vez que Felipe VI le encargó intentar su investidura y, ahora que hay otro candidato intentándolo, “no deja que otros intenten sumar a un acuerdo” al PP. Reprochó de esta manera que Rajoy haya rechazado la petición que le hizo por carta el pasado jueves para reunirse con él antes del debate de investidura y explicarle el pacto de gobierno firmado por el PSOE y Ciudadanos, un “acuerdo constitucionalista” que, a su entender, puede ser asumido por los populares porque “muchas de las propuestas están en su programa”.

Mientras, la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, recordó al PSOE que tiene abierta la opción de un Gobierno de coalición con el PP y Ciudadanos, si fracasa la investidura de Sánchez, y dejó en manos de los socialistas toda la responsabilidad para evitar nuevas elecciones. A su entender, solo hay dos posibilidades: que los socialistas apoyen un Gobierno del PP presidido por Rajoy, de amplia mayoría, coalición o como se quiera denominar, o que logren el apoyo de Podemos. Y es que, el resto, “da para escribir mucho, pero no para ganar una investidura”. Sáenz de Santamaría también replicó a Rivera que su documento con el PSOE no es un acuerdo de constitucionalistas, sino de “socialistas”. Amén de avisar sobre subida de impuestos como sociedades o sucesiones y donaciones, apuntó que el pacto tiene “muchos elementos de calado y de filosofía política y económica” que hacen que el PP no pueda secundarlo de ningún modo. - E. P./Efe