"Aquí en España por encima de la ley no hay nadie. Primero la ley y luego lo demás", ha dicho Rajoy en su discurso de clausura de la interparlamentaria del PP.
Y ha insistido en que ese diálogo sólo se puede hacer en el marco de la ley, además de reiterar que las reglas de juego que los españoles acordaron en la Constitución se puede cambiar, pero "con el acuerdo de todos".
Rajoy ha advertido también a Mas de que el diálogo debe ser "lo contrario" de lo vivido estos últimos meses, con un "monólogo" y con una política de "imposición" y de "hechos consumados" por parte del presidente catalán.
"Aquí se ha anunciado un referéndum, la pregunta y la fecha sin hablarlo", ha lamentado Rajoy. "Y luego se pretende que le demos lo que no podemos hacer ni queremos", porque no hay "viabilidad legal" para ello, ha añadido.
La política es entre otras cosas "el arte de diálogo", ha continuado el jefe del Ejecutivo, para quien ese diálogo "es avanzar hacia un punto de encuentro".
Y "sólo hay una condición", ha advertido, que es la de hablar "dentro del campo de juego donde cabemos todos, que es la ley". "La ley es el diálogo de una democracia consigo misma", ha recalcado.
También ha tenido Rajoy un reproche para el líder del PSOE, Pedro Sánchez, cuando ha advertido de que en "momentos de dificultad" como éste "no son buenas las ocurrencias" y "es mejor mantener la serenidad, la calma y actuar con responsabilidad".
"Si alguien quiere hacer reformas" en el ordenamiento jurídico "que nos diga exactamente qué quiere hacer, porque no es momento de hacer eslóganes ni sacarse conejos de la chistera", ha dicho Rajoy en este mensaje dirigido a los socialistas.
Y por eso ha pedido a "algunos" de sus adversarios políticos "un poco de responsabilidad" que, según ha admitido, "están teniendo en muchos temas", mientras en otros está "esperando" a que la tengan.
"Quiero que sigamos juntos, la inmensa mayoría de los españoles quieren también que sigamos juntos", ha sentenciado Mariano Rajoy, quien entre las razones para este deseo ha subrayado las relaciones familiares y comerciales, una unión de varios siglos o porque España es ahora mismo un país, ha señalado, del que todos se pueden sentir "orgullosos".
Además ha insistido en que si los catalanes se "van de Europa" sería "malo para ellos y para todos". "Separados somos menos, menos fuertes, menos prósperos, con menos bienestar y menos influyentes", ha advertido Rajoy.
Y juntos, "ganamos todos, nos superamos", hay "más bienestar" y los españoles son "más fuertes y más influyentes" ha insistido Rajoy en este discurso en el que ha reafirmado su compromiso y el de su partido con la Constitución.
Eso sí, ha vuelto a admitir que las reglas de juego que recoge la Carta Magna "se pueden cambiar", pero sólo "con el acuerdo de todos y no porque lo diga nadie en concreto". "Porque eso es la democracia", ha concluido.