GASTEIZ. La Presidencia del Parlamento Vasco ha decidido hoy abrir un procedimiento sancionador simplificado al parlamentario de EH Bildu, Hasier Arraiz, por haber llamado "fascista" al popular Borja Sémper, y le ha dado la oportunidad de explicar mediante audiencia previa lo sucedido.

l pasado martes el Parlamento Vasco decidió abrir diligencias para determinar quién fue el parlamentario de la coalición abertzale que llamó fascista al portavoz popular, Borja Sémper, con el fin de iniciar un expediente sancionador.

El PP apuntó desde un primer momento al presidente de Sortu, Hasier Arraiz, quien admitió el domingo en un artículo publicado en el diario Gara que "faltó al decoro parlamentario" al llamar "fascista" al portavoz popular, Borja Sémper, y asumió "toda la responsabilidad" de sus actos.

El incidente se produjo el 3 de octubre en el pleno de control del Parlamento regional cuando Sémper denunció que desde la bancada de EH Bildu le habían llamado "fascista" y pidió a la presidenta de la Cámara, Bakartxo Tejeria (PNV), que actuara, pero ésta no tomó ninguna determinación alegando que no había oído nada. Ese mismo día el PP presentó una queja y pidió la apertura de un expediente disciplinario contra Arraiz.

Una vez que Arraiz ha reconocido la autoría del insulto, el paso siguiente a la apertura de diligencias es abrir un procedimiento sancionador, tal y como se ha hecho hoy.

Como se trata de una infracción leve, el reglamento de la Cámara contempla que este procedimiento se lleve a cabo de manera simplificada, que comienza con la audiencia previa o descargo del parlamentario inculpado.

Por estos hechos Arraiz se enfrenta sanciones que van desde una amonestación o apercibimiento por escrito hasta la suspensión temporal de los derechos como parlamentario por un plazo no superior a un mes.