aPARCAR sin dar veinte vueltas, pasear por el centro sin aglomeraciones, tomar algo en una terraza a la luz del sol... En Vitoria el mes de agosto tiene un encanto especial que sólo conocen los que, por deseo o por obligación, se quedan en la capital alavesa a pasar sus vacaciones estivales o llegan de fuera para conocerla de cerca. Durante muchos años, la ciudad se convertía en el escenario de una película de zombis una vez finalizaban las fiestas de La Blanca, cambiando a los muertos vivientes por turistas de tez blanca y mapa en mano.
Sin embargo, por lejos que se remonte, la leyenda de la Gasteiz desértica en estas fechas parece haber pasado a mejor vida, un poco por el incremento de visitantes y un mucho por los efectos de la crisis, que obliga a los gasteiztarras a permanecer en sus casas por mucho que estemos en pleno mes de agosto. "El mito de la Vitoria vacía era cierto hace años, pero hoy en día no es real. Al menos en la zona centro y los puntos más turísticos no se notan los efectos de las vacaciones", subraya Ana Lasarte, responsable del Servicio de Turismo del Ayuntamiento de Vitoria, que destaca el auge del sector privado a la hora de programar actividades que atraigan a vitorianos y turistas en pleno periodo estival. "Nosotros siempre pensamos en ambos para realizar la programación de verano. En Vitoria hay muy pocas cosas que se hagan pensando sólo en el turismo", asegura Lasarte, que cita las visitas guiadas sobre la ciudad, conocidas como Vitoria de leyenda, o los paseos en globo sobre la superficie alavesa como alternativas para el público autóctono.
Visitas teatralizadas nocturnas, recorridos por la Vitoria de la ilustración recogiendo la resaca del bicentenario de la batalla, el clásico recorrido por la Catedral de Santa María... Actividades atractivas para visitantes que, sin embargo, llevan a muchos vitorianos a preguntarse qué les ofrece su ciudad, Ayuntamiento y sector privado incluido, para dedicar sus horas de ocio durante estos días de calor. Algo que les haga disfrutar sin sentirse un turista en tu propia ciudad. Algo como, por ejemplo, las jornadas sobre periodismo a pie de calle que el Palacio de Villa Suso acogerá del 20 al 29 de este mes, con conferencias, mesas redondas y sesiones de cine sobre la Primavera Árabe o los efectos de la crisis en el territorio europeo.
Antes de eso, Villasuso abrió ayer sus puertas a la exposición del fotógrafo Samuel Aranda sobre los conflictos en Yemen, Libia, Túnez o Egipto. Alternativas para los amantes de la actualidad política y cultural que prefieran concienciarse sobre los problemas del mundo actual en lugar -o después- de tostarse al sol en las piscinas de la capital alavesa. Frente a los conflictos socio-políticos, una alternativa para los más pequeños pasa por el festival Titereando, con actuaciones de títeres y marionetas los días 18 y 25 de este mes en la plaza de la Burullería y el palacio Escoriaza-Esquível.
Pero, como bien asume Ana Lasarte desde el departamento de Turismo del Consistorio gasteiztarra, la programación ideada por el ejecutivo local no tendría sentido sin el apoyo de iniciativas privadas, más modestas tal vez pero igualmente atractivas para el público. "Son los comercios y los establecimientos hosteleros los que hacen ciudad. Hace años era una pena ver todo cerrado, pero ahora está visto que en Vitoria hay negocio en agosto", resalta Lasarte.
Cine y conciertos Y ahí, a la hora de atraer a los gusten más de la noche que del día, destaca sobre todo el espacio ubicado en los jardines de Falerina, auspiciados por el Hor Dago! Allí, los días 20, 21 y 22 a partir de las 22.00 horas, está programado el ciclo de cine al aire libre que iluminará el punto más alto del Casco Viejo con los fotogramas de las películas El Río, Old Joy y la producción alavesa Chaika. Montehermoso es escenario también en agosto de la muestra Non Stop, con obras de los alumnos de la facultad de Bellas Artes de la Universidad del País Vasco. Cambiando la cultura por la naturaleza, los humedales de Salburua serán escenario el día 25 a las 18.00 horas de una visita guiada por la exposición de fotografía Las aves y el color de sus vidas, ubicada en el centro Ataria.
Pero si lo que uno quiere es dejarse de naturaleza, conflictos geopolíticos y visitas teatralizadas para dedicarse sólo a bailar, también Vitoria ofrece alternativas en agosto. Por un lado, la música electrónica del bilbaíno Trsktt esta noche a las 0.00 horas en el Hor Dago!, y el stoner de los franceses Mars Red Sky en el mismo lugar el próximo viernes a las 20.30 horas. Para los que prefieran mover las caderas a un ritmo más pausado, los bailables en la plaza de la Florida cada sábado y domingo a las 19.00 horas. En definitiva, hay música, hay exposiciones, hay charlas, hay conciertos y hay visitas guiadas para todos los públicos. Este año sí, Vitoria ha dejado de ser Zombitoria cada mes de agosto.