vitoria. Solo lleva unos meses en el cargo. Sin embargo, Garbiñe Sáez Molinuevo tiene muy claras cuáles serán las líneas sobre las que desarrollará su mandato. Se establecerán los "sectores más vulnerables" con la relación a la seguridad vial y se trabajará para implementar "medidas" dirigidas a ellos. Además, la "coordinación y colaboración" con otras instituciones se volverá clave. Y, por supuesto, tratarán de acercar la información del tráfico a los ciudadanos, de una manera "clara y transparente" apoyándose en las nuevas tecnologías.

Finalizada el operativo especial de Semana Santa, ¿qué valoración hace?

Es un balance positivo. Es para felicitarnos que no hayamos tenido ningún fallecido en nuestras carreteras. En un primer momento, contabilizamos que había un fallecido en Gernika pero posteriormente los médicos determinaron que había fallecido por un infarto y por eso se salió de la calzada. Además, en cuanto a siniestralidad, también hemos bajado. Se han registrado 86 accidentes, 37 menos que el año pasado.

¿Cuáles serían las causas de ese descenso de accidentes?

El número de vehículos en las carreteras de Euskadi ha sido similar a 2012. No se puede determinar una causa concreta. Pero puede que la concienciación y la prudencia tengan mucho que ver. Esta Semana Santa, la meteorología ha sido adversa. Cuando la red viaria está húmeda o mojada, ponemos más prudencia y atención a la hora de conducir.

En la presentación del operativo de Semana Santa se anunció que casi medio millón de vehículos pasarían en las carreteras vascas. ¿Se han cumplido las expectativas?

Teníamos una previsión de 457.000 vehículos por nuestra red viaria. Todavía tenemos que contrastar nuestro datos con los de las autopistas. Pero hay un punto en concreto que siempre tenemos en cuenta, que es el de La Haya. Entre el miércoles por la tarde y el jueves por la mañana, se contabilizaron 200 vehículos menos que en 2012. Por lo tanto, nos estamos moviendo en cifras similares.

Afronta su primer mandato en la Dirección de Tráfico. ¿Cuáles van a ser sus líneas de actuación?

A lo largo de la legislatura vamos a desarrollar tres ejes. Por un lado, queremos hacer hincapié en determinar los sectores más vulnerables, qué porcentajes de la población están sufriendo más respecto a la seguridad vial. De esta manera, podemos determinar los sectores a los que irán dirigidas nuestras campañas y medidas. Por otro lado, está la coordinación y colaboración con el resto de instituciones porque todas tenemos datos que aportar. Y por último está la información a la ciudadanía. Va a ser clara, transparente, cercana y momentánea. Vamos a poner las nuevas tecnologías al servicio del ciudadano para que pueda tener cuanta más información posible de la red viaria vasca.

El año pasado se incrementaron los controles de alcohol y drogas. ¿Va a seguir esa tendencia?

Trabajando con la Ertzaintza intentamos mirar y revisar dónde ha podido haber mayores infracciones y poner más hincapié en esas campañas.

En estos momentos, está en tramite la reforma de la Ley de Tráfico que incluye medidas como el aumento de velocidad en autopistas hasta los 130 km/h. ¿Es factible en las carreteras vascas?

La orografía y la climatología de Euskadi es muy particular. La propuesta que hemos emitido a Madrid es que se establezcan límites máximos que puedan variarse a la baja según las circunstancias cambiantes. Esto es, si Madrid determina que la velocidad a la que se puede llegar a una vía son 130 km/h, que se establezca y después ya se aminorará. Nosotros no vemos necesario aumentar los 120 km/h actuales teniendo en cuenta nuestra orografía y climatología.

También se estudia la reducción de la velocidad en vías secundarias.

Tendríamos que observar mucho más la realidad y las competencias que tienen las distintas instituciones.

Uno de los sistemas que obligan a mantener la velocidad en una carretera son los radares, pero en puntos concretos. ¿Se ha pensado en instalar radares de tramo?

La política de esta Dirección de Tráfico no es poner ni quitar radares. Ojalá no tengamos que poner ningún radar porque se cumple la normativa de seguridad vial. Pero si vemos que en una vía no se está cumpliendo la normativa y no hay otras medidas que se puedan adoptar y la última es instalar un radar, se pone. Nuestra intención es trabajar por la concienciación y la sensibilización de todos aquellos que utilizamos las vías.

Prohibir los detectores de radar también se incluye en la reforma.

En la modificación que han hecho en el reglamento debería de haber también una modificación legal. Es un ámbito que no está claro. El Gobierno de Madrid debe determinar qué pretende con esa modificación.

Uno de los aspectos más controvertidos de esa reforma es el que habla de la obligatoriedad del casco para los ciclistas en todas las vías.

Tenemos claro, y así lo aportamos a Madrid, que en las vías interurbanas siempre va a ser obligatorio el uso del caso. Pero por otro lado, en las vías urbanas tenemos que dar oportunidad a los ayuntamientos a dotar una ordenanza municipal en la que se establezca si es obligatorio el uso del casco o no ya que valorarán sus vías. Los municipios que aprueben una ordenanza municipal determinarán si es obligatorio o no el uso del casco en sus vías urbanas. Si no existe esa ordenanza municipal, habrá obligatoriedad del mismo.

Precisamente los ciclistas están resultando muy afectados en los últimos días. Antes de Semana Santa comenzó una campaña de sensibilización.

Empezamos con los consejos radiofónicos y vamos a hacer una guía en la cuál las personas que utilicen la red viaria, ya sean ciclistas, corredores o automovilistas, sepan hasta dónde pueden llegar, qué normas tienen que cumplir y cómo tienen que respetar al resto de personas que utilicen esa vía. Es un sector que nos preocupa por su vulnerabilidad. El automovilista tiene la protección del armazón mientras que el ciclista tiene la de su casco.

Con la llegada del buen tiempo, los ciclistas son más protagonistas.

Cuando empiece el sol, volverán a ocupar las carreteras. Es un plazo de tiempo en el que haremos hincapié en el ciclismo.

Otros de los usuarios de las vías más indefensos son los peatones.

Es un sector que nos preocupa. Estamos viendo que fallecen personas en las calles de los pueblos y los municipios tras ser atropelladas por automóviles y bicicletas. Queremos encaminar campañas y poner las medidas necesarias y adecuadas para ello.

¿Hay que concienciarles más?

Necesitamos la concienciación de todos, tanto de los automovilistas, ciclistas como de los peatones. Tenemos que saber que todos tenemos derechos, obligaciones y normas que cumplir. El problema es que cuando nos saltamos alguna de estas normas, podemos agredir a esa persona que tiene menos protección a la hora de estar en la carretera o en la calle.

También se está estudiando retirar el carné de conducir por prescripción médica.

La población vasca está envejeciendo, no somos una isla. Cada vez son más los conductores y personas mayores que utilizan las vías. Un importante porcentaje de accidentalidad lo están sufriendo personas mayores de 64 años, tanto conductores, ciclistas como peatones. No sabemos si la solución es la retirada del carné de conducir. Por ello, tenemos que tener un trato especial para ver qué medidas son las más adecuadas para ese sector poblacional.

Las imprudencias de los famosos al volante, ¿echan por tierra todas las campañas de concienciación?

Quienes estamos expuestos al público tenemos un plus de responsabilidad. Me parecen irresponsables todas esas actuaciones de personas famosas. Estando de cara al público tenemos una exposición superior y en ese sentido tenemos que dar ejemplo.