GASTEIZ. El fiscal Superior del País Vasco, Juan Calparsoro, ha ordenado hoy el archivo de un supuesto caso de fraude en la contratación de servicios informáticos por parte del Departamento de Justicia cometido entre 2000 y 2009, cuando estaba dirigido por Joseba Azkarraga (EA).

El exconsejero vasco se ha felicitado de que la investigación haya concluido con el archivo de las diligencias pero ha denunciado la "intencionalidad política" que, a su juicio, ha impulsado este proceso y se ha preguntado si ha quedado a salvo la honorabilidad de las personas afectadas "cuando el caso ha trascendido como si se tratara de hechos consumados".

Ha denunciado que "la osadía de los promotores políticos de esta denuncia ha sobrepasado todos los límites" y ha recordado que "la consejera de Justicia llegó a decir que lo ocurrido era tan claro que se le podría poner hasta el artículo del Código Penal".

Asimismo, ha criticado que la viceconsejera de Justicia, Victoria Cinto, "amenazó con la exigencia de indemnizaciones a las empresas implicadas y llegó a sentenciar como ilícitos comportamientos de personas vinculadas a la Administración".

Azkarraga ha dicho que tiene "el pleno convencimiento de que la imprudencia y falta de responsabilidad de Mendia y de Cinto no ha sido fortuita" y ha considerado que pusieron el "ventilador" para distraer la atención sobre sus propias carencias.

Ha denunciado que "algunos quisieron montar un caso donde no lo había y se han empeñado en mantenerlo casi como lección de decencia para denigrar a sus antecesores en el Gobierno vasco" pero "hoy podemos concluir que les ha salido el tiro por la culata", ha agregado.

Por ello, ha pedido una rectificación pública a Mendia y a Cinto y ha advertido de que "si no lo hacen, será la constatación de que no sólo son personas incompetentes sino también miserables".

"Han hecho mucho daño a muchas personas y lo han hecho a sabiendas, por ello, considero que la rectificación es una ineludible exigencia", ha añadido.

A juicio de Azkarraga, detrás de la denuncia ha habido "mala fe" y ha lamentado que "el ánimo por tapar su incompetencia ha puesto en riesgo la imagen de la justicia".

"Espero que un próximo Gobierno vasco haga olvidar rápidamente este período de cuatro años que, sin duda, ha sido el más nefasto de nuestro autogobierno", ha concluido.