MADRID. El juicio a Baltasar Garzón por haberse declarado competente para investigar los crímenes del franquismo ha comenzado a las 10:45 horas, una vista a la que asisten varios representantes de asociaciones internacionales de derechos humanos.

El magistrado, que la semana pasada fue juzgado en el Supremo por ordenar las escuchas en prisión a abogados del "caso Gürtel", se enfrenta ahora a una petición de 20 años de inhabilitación que plantea la acusación popular, que ejercen conjuntamente el sindicato ultraderechista Manos Limpias y la asociación Libertad e Identidad.

Entre los asistentes en la sala de vistas hay representantes de Amnistía Internacional, Human Rights Watch y de la Comisión Internacional de Juristas, que participan como "observadores" en el juicio porque creen que la decisión del Supremo incidirá sobre otros procesos relacionados con la persecución de delitos de jurisdicción universal, en la que España fue pionera gracias a Garzón.

La sala que juzga desde hoy a Garzón está integrada por los magistrados Carlos Granados (presidente), Andrés Martínez Arrieta (ponente), Julián Sánchez Melgar, Perfecto Andrés Ibáñez, José Ramón Soriano, José Manuel Maza y Miguel Colmenero.

Según han informado fuentes jurídicas, el Tribunal Supremo ha vuelto a rechazar esta mañana la recusación de Perfecto Andrés Ibáñez después de que el sindicato ultraderechista Manos Limpias recurriera en súplica el rechazo del Alto Tribunal a apartar a este magistrado, del que consideran que tiene "interés directo o indirecto en la causa".