ZARAGOZA. El torero Juan José Padilla se encuentra "muy estable" aunque no recuperará la movilidad de la parte izquierda de la cara y posiblemente tampoco la visión del ojo afectado, según explicó ayer el equipo médico que le atendió tras ser corneado en el rostro en la segunda corrida de la Feria del Pilar.

En una rueda de prensa en el Hospital Miguel Servet, de Zaragoza, en cuya UCI se encuentra ingresado el diestro, la doctora Victoria Simón explicó que en el primer escáner se observaba que el nervio óptico estaba "muy elongado y un poco fuera de su sitio, por lo que la viabilidad de ese ojo es dudosa" y la previsión no es "nada positiva".

La doctora Esther Saura, jefa de cirugía maxilofacial del Miguel Servet, detalló que el asta entró por la parte de atrás de la mandíbula y "atravesó todas las estructuras óseas del lado izquierdo de la cara, hasta salir por la región supraorbital", lo que provocó muchas fracturas que ya "están reducidas y fijadas". También indicó que habrá una parálisis facial por arrancamiento del nervio facial y, respecto al pronóstico de la visión del ojo izquierdo, ha reconocido que "es muy incierto".

Padilla se encuentra en la UCI, bajo sedación y ventilación mecánica, pero aunque "las complicaciones siempre pueden surgir" espera que "el pronóstico sea favorable", teniendo en cuenta que no hay otras lesiones añadidas, explicó Utande, jefa de medicina intensiva del hospital.

Jaime Padilla, hermano del torero y banderillero, reconoció a los medios que la del viernes fue "la peor noche" de su vida, ya que esperaban con mucha incertidumbre una llamada desde Zaragoza y hasta las cuatro de la mañana de ayer no tuvieron noticias sobre el estado del diestro. Aun así, declaró que "estamos con muchas esperanzas". También habló el apoderado del torero, Diego Robles, quien remarcó que detectó la gravedad de la cornada ya en la enfermería, porque la herida era muy espectacular y sangraba mucho.

El torero Padilla resultó corneado el viernes tras clavar el tercer par de banderillas al cuarto toro de la ganadería de Ana Romero en la segunda corrida de la Feria del Pilar.