PAMPLONA. Quizás el 7 de diciembre de2009 sea un día para recordar en las próximas décadas o quizásno. De eso depende lo que se debate hoy en Copenhague donde se hadado la salida a la contrarreloj por llegar aun acuerdo “sólido yambicioso” sobre las emisiones de gases contaminantes y residuos ysobre un patrón de desarrollo sostenible en el Plantea en la que esya desde hoy la mayor cumbre jamás organizada sobre el clima, laTierra y la actitud de todos los países del mundo ante este asunto,con unos 15.000 participantes.

Aquí ya se han visto las divergenciasprincipales entre países ricos y países pobres (o no ten ricos), dehecho según la onegé Intermon Oxfam el éxito o fracaso de lacumbre, más que de acuerdos depende de 135 millones de euros al añoa fondos públicos adicionales para ayudar a los países empobrecidosa reducir sus emisiones y adaptarse al cambio climático.

Deesta manera, la organización cree que se provocaría "unareacción en cadena" que llevaría al "éxito" a laCumbre del Clima de la ONU que ha comenzado esta mañana enCopenhague. Para Oxfam Internacional, esa cifra "podríasignificar la diferencia entre el éxito y el fracaso en Copenhague".

Por su parte, tanto el primer ministrodanés, Lars Loekke Rasmussen, y el responsable de los preparativosde la conferencia, Yvo de Boer, afirmaron hoy que sólo se podráhablar de éxito si se acuerdan "acciones significativas einmediatas que entren en vigor al día siguiente de la clausura"de esta cumbre.

Recordó que la cuenta atrás ya haempezado y que es hora de dar respuestas, por lo que pidió a losdelegados de los 192 países reunidos en la cumbre de Copenhague, quese celebrará hasta el día 18, un "pastel de Navidad"formado por tres capas.

Habrá que consensuar lacomplementación de acciones inmediatas de mitigación, adaptación,financiación y tecnología; luego asegurar la financiación a largoplazo y por último, tener una visión compartida sobre un futurobajo en emisiones de CO2 para todos.

La presidenta de la conferencia, ConnieHedegaard, manifestó que "se acabó el tiempo de reiterarposiciones y de declaraciones. Hace falta acción real" yaseguró que es "el momento de actuar", pese a que "haymuchos obstáculos".

Aunque para una gran mayoría ya estádescartado un documento vinculante en Copenhague, José Hernández deToro, portavoz de la ONG Oxfam Internacional, expresó su confianzaen que "se logre un acuerdo que sea justo con los que más hansufrido las consecuencias del cambio climático sin haberloprovocado".

Pero tanto los movimientos ecologistascomo muchos delegados de los 192 países participantes dan pocasposibilidades de alcanzar el ambicioso compromiso global de recortarhasta el 40% de los gases de efecto invernadero hasta 2020, frente alos valores de 1990.

Según Hernández de Toro, lo que debeevitarse es que los líderes políticos, de los que más de uncentenar han confirmado su asistencia a la cumbre, vayan a Copenhague"sólo para sacarse la foto" y no consigan ningúncompromiso.

En este contexto, el primer ministrodanés, Lars Loekke Rasmussen, recordó ante la sesión plenaria queel mundo confía en las delegaciones y todos los reunidos para forjarun acuerdo y que "los líderes no han venido a Copenhague sólopara hablar, sino para actuar".

"Necesitamos un acuerdo quesatisfaga a todas las partes y que sea, además, fuerte y ambicioso",explicó el primer ministro danés, tras apuntar que vendrán aCopenhague los 110 jefes de Estado y de Gobierno en lo que calificóla mayor movilización hasta ahora para combatir el cambio climático.

China y Estados Unidos, los dos paísesmás contaminantes del mundo, con un 40% de las emisiones de CO2,acuden a Copenhague con una propuesta de recorte, al igual queBrasil, que va a la conferencia con una nutrida delegación de másde 700 miembros.

La ceremonia inaugural de hoy, quecomenzó con un retraso de más de 40 minutos, estuvo protagonizadapor el trompetista danés Palle Mikkelborg y el coro juvenil femeninode la televisión pública danesa DR.

Con unas condiciones meteorológicas defrío y lluvia, una veintena de manifestantes y ecologistas se habíanapostado en la entrada del centro de conferencias Bella Center parapedir resultados concretos en la cumbre.

Por la tarde estaban previstas lasactividades del foro alternativo "Klimaforum" con unprograma de música, teatro, debates y exposiciones, todo ellofinanciado por el gobierno anfitrión danés y diversospatrocinadores privados.