Las frutas y las verduras son alimentos que mayoritariamente tenemos en nuestra nevera porque, gracias a su frescura, aroma y sabor nos ayudan a que tengamos una vida más saludable. También nos refrescan, ya que nos brindan energía, sacian nuestro apetito y nos ayudan a nutrir el organismo. Por ejemplo, las cerezas, las manzanas, el pepino o la zanahoria, son ideales para saborear y disfrutar durante el verano porque son perfectas para picar en cualquier momento del día.

No obstante, estos alimentos no duran mucho, especialmente durante el verano. Por tanto, para evitar que las frutas y verduras se pudran con rapidez, el Instituto Nacional de Enfermedades Digestivas y Renales, da algunas sugerencias para conservarlas adecuadamente para no perder perder su frescura y y aroma.

Lavar antes de almacenar

Es importante lavar las frutas y verduras entre unos cinco a diez minutos para quitarle los restos de tierra del lugar en donde fueron comprados los alimentos porque existe la posibilidad de contaminar otros alimentos ya guardados en el cajón, y acelera su proceso de descomposición.

Comer frutas y verduras hace que tengamos más energía. Freepik

Usar recipientes de mimbre

El instituto recomienda las canastas o recipientes de mimbre porque son elementos perfectos para conservar frescas las frutas y verduras. Este material está compuesto por fibras naturales que facilitan la transpiración de alimentos, e impiden que se llenen de moho y otras bacterias. Sin embargo, también sugieren retirar las bolsas plásticas y demás envases de los alimentos.

Separar los alimentos

Las frutas y las verduras son diferentes, por lo que no hay que combinarlas en ningún momento dado a sus distintas propiedades, características y procesos de maduración. Por eso es necesaria su separación al momento de optimizar la conservación.

Bolsas transparentes

Usar bolsas de plástico es es método muy útil para prolongar la vida de estos alimentos. Pero para usarlos adecuadamente, debemos hacer pequeños agujeros en el plástico para que las frutas y verduras no se condensen o pudran.

Consumirlos en pocos días

Los especialistas recomiendan consumir las frutas y las verduras en dos semanas porque los largos periodos de almacenamiento producen pérdidas de sabor, aroma y empiezan a salir bacterias en los alimentos. Por ejemplo, las fresas duran cinco días máximo, las manzanas hasta tres semanas y las verduras cocidas entre tres a cuatro días.

En cualquier caso, la fruta y la verdura son alimentos importantes para llevar una vida saludable. Es más, si queremos llegar al objetivo último, hay que saber comprarlos adecuadamente y, para que perdure más tiempo, saber cómo almacenarlas.