La relación de la hija de Paz Padilla lleva semanas en el punto de mira. La última vez que se vio a la influencer junto a su pareja, Iván Martín, fue el pasado marzo, cuando viajaron a Jerez de la Frontera al bautizo de los hijos del empresario José Luis López, y desde entonces ni rastro de ellos, por lo que todas las alarmas apuntan a una posible crisis sentimental.
¿ESTÁN EN CRISIS?
Anna ha pasado las vacaciones de Semana Santa en Zahara de los Atunes con sus amigas y no ha hecho ni la más mínima mención a su novio, ni para desmentir ni para confirmar la posible ruptura, así como tampoco lo ha hecho Iván, que ha reaparecido en redes tras varios días de descanso.
"Hola de nuevo. He estado unos cuantos días fuera porque lo necesitaba, porque si la cabeza no está bien, nada está bien", decía el joven a sus seguidores al retomar sus redes sociales, "gracias por preocuparos por mí. Ya os iré contando", ha añadido.
LA HISTORIA DE AMOR DE ANA E IVÁN
La pareja comenzó su relación en 2019, y tras dos años de relación, el pasado mes de septiembre decidieron dar un paso más en su relación e irse a vivir juntos.
También juntos superaron los momentos más difíciles como el fallecimiento de Antonio Vidal, marido de Paz Padilla, un duro golpe en el que Iván se convirtió en el mayor apoyo de la influencer y también de su suegra, un bonito gesto que hizo que su chica le dedicara unas sentidas palabras mientras atravesaba el duelo.
"Gracias por haber estado al pie del cañón desde el minuto cero. Has sido mi mayor apoyo, mi motor y mi vía de escape. Nunca podré agradecerte todo lo que has hecho por nosotras, no sé qué habría hecho sin ti. Te quiero", le decía entonces.
Antes de comenzar su noviazgo, fueron buenos amigos durante mucho tiempo, aunque llegó un momento en el que algo cambió.
"Hubo un momento en el que algo cambió y ambos lo sentimos... Va pasando el tiempo y vas sintiendo cada vez más por esa persona", explicó Anna en su Instagram al ser preguntada por los inicios de su relación.
"Algo que me hizo saber que era 'él' es que nunca me preocupó o tuve miedo de que me hiciera 'goshting', es decir, que desapareciera de la noche a la mañana sin dar ninguna explicación. Siempre estuve tranquila, cosa que no me había pasado antes con ningún otro chico. Y ahí entendí lo que era amor de verdad, el sano, el no sufrir, temiendo que mañana me fuera a dejar... lo hizo muy fácil. Y mil motivos más que me hacen querer pasar mi vida con él", revelaba Ferrer sobre sus sentimientos hacia su chico.
¿Terminará el tiempo confirmando la crisis?, o ¿solo son rumores sin fundamento?.