El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi, de 85 años, y su pareja, Marta Fascina, de 32 y diputada de Forza Italia, han celebrado este sábado su "no boda", tal y como lo ha definido él mismo ante la prensa italiana. En la fiesta no faltó de nada, excepto un certificado legal que diga que ambos son marido y mujer. También estuvieron presentes todos los amigos del político y sus hijos, menos Pier Silvio por coronavirus.
Por ello, más que una boda fue una "fiesta del amor", como lo llamó el propio Berlusconi cuando hace unas semanas se comenzó a rumorear que podía casarse con Fascina. Han decidido no hacerlo por cuestiones legales, ya que esto podía conllevar problemas de herencia cuando fallezca el ex primer ministro.
La fiesta comenzó a las 13:00 horas en Villa Gernetto, una de las mansiones de Berlusconi en la localidad de Gerno, en la provincia de Mónza (norte) que el empresario quiere que sea la sede de su universidad dedicada a estudios de Política.
Más de medio centenar de personas acudieron a la celebración, entre los que no podía faltar los amigos del 'Il Cavaliere' como el vicepresidente de Forza Italia, Antonio Tajani, Fedele Confalonieri o Niccolò Ghedini, Marcello Dell'Utri. Una de las personalidades más destacadas fue la del líder de la Liga, Matteo Salvini. Paolo Barelli, portavoz de la formación en la Cámara de los diputados no pudo asistir al encontrarse confinad. Hay que decir que todos los asistentes se tuvieron que realizar una prueba previa para confirmar que no estaban contagiados.
Según informó el diario 'Il Corriere della Sera', hubo una ceremonia simbólica en la capilla de la finca, sin ningún valor legal.
Berlusconi pronunció su discurso dedicado a su compañera Marta, y antes de que se sirvieran los primeros platos, volvió a tomar la palabra brevemente para saludar y agradecer: "Estoy feliz de tener a la gente querida aquí conmigo en este día".
La no novia lució un vestido blanco de encaje francés, creación de Antonio Riva, y Berlusconi llevaba un traje azul firmado por Armani. Para la ocasión, Villa Gernetto fue decorada con 150 estatuas, juegos de agua en las fuentes y un chorro en forma de torta en la fuente principal.
Menú tres estrellas Michelin
La comida fue servida por el restaurante tres estrellas Michelin 'Da Vittorio'. El menú incluía ravioli de ricotta y patata al azafrán, los famosos "Paccheri Vittorio", ternera al vino tinto con patatas negras y crema de zanahorias a la canela, entre otros. Y la tarta nupcial de tres pisos, como los tres años que llevan juntos.
Berlusconi se animó, al final de la comida, a cantar algunas canciones en francés, con Fedeli Confalonieri al piano.
En cuanto a los regalos, los novios ya se los habían dado unos días antes. Ella recibió un anillo con un diamante y él una escultura en escayola del entrelazamiento de las dos manos para él.
Berlusconi y Fascina comenzaron su relación en 2020, cuando los medios hicieron públicas unas fotos de ambos en Suiza.
En estos dos últimos años, Fascina ha estado siempre al lado de Berlusconi, como cuando intentó presentarse a presidente de la República en las pasadas elecciones en enero, un movimiento que no salió bien al magnate, así como en las múltiples ocasiones en las que ha estado ingresado por problemas de salud.