Aunque el invierno no hará su entrada oficial hasta el 21 de diciembre, las temperaturas se han desplomado tras la llegada de las primeras nevadas y heladas.
Esta estación es uno de los momentos del año que pone a prueba el estado de los vehículos. En caso de no haber sido revisados adecuadamente pueden causar grandes inconvenientes a los conductores. La mayor parte de los imprevistos que sufren los vehículos en invierno son evitables con medidas preventivas que pueden realizarse en el taller o en casa.
Por ello, los expertos de Oscaro recomiendan estos pasos para circular con más seguridad.
Comprobar y rellenar líquido anticongelante
El líquido anticongelante es el encargado de refrigerar el motor. En invierno, evitar que se congele el agua de la refrigeración es fundamental para que no revienten los manguitos o, incluso, el propio motor. Cuidar el vehículo si va a estar parado durante varias horas en épocas de mucho frío es sencillo, solo se debe recurrir al libro de mantenimiento del coche para ver cuándo ha sido la ultima sustitución y asegurarte de que el nivel del depósito con el líquido rosa o verde del motor es adecuado. Además, también es recomendable comprobar el líquido del limpiaparabrisas evitar que los tubos o las boquillas se congelen y que esto perjudique la visibilidad del conductor en caso de lluvia o nieve.
Para aquellos que se deciden a hacerlo en casa es fundamental comprobar que el líquido anticongelante elegido sea compatible con el motor de su vehículo.
Cambiar los limpiaparabrisas y limpiar las lunas
Las escobillas son un elemento fundamental para garantizar la visibilidad al volante. En esta época del año las lluvias y nevadas hacen que sean todavía más importantes para evitar no solo el agua sino que la sal de la carretera se fije en nuestras lunas, los focos de los vehículos deslumbren€etc.
Aprovechando las revisiones y recambios característicos de este momento del año es recomendable renovar también las escobillas deterioradas por el uso y el paso de tiempo. En el caso se haber renovado esta parte del vehículo y que la visibilidad no alcanza los niveles adecuados, es recomendable limpiar las lunas con limpiacristales tanto por fuera como por dentro.
Evitar la humedad del vehículo y cambiar filtros
Evitar la humedad del vehículo y cambiar filtrosLa suciedad no es el único factor que puede reducir la visibilidad del conductor al volante. La condensación del aire, especialmente en invierno, es muy peligrosa ya que la diferencia de temperatura puede empañar las lunas. Para reducir la condensación en el parabrisas y las ventanas se recomienda cambiar el filtro para el polen para que el intercambio de aire, la ventilación y la climatización funcionen adecuadamente.
Revisar la batería y el sistema de alumbrado
La batería es el elemento que se encarga de arrancar el motor del vehículo y el frío aumenta la posibilidad de que se descargue. Para revisar su estado simplemente se debe conectar un voltímetro a los bornes y asegurarse de que el voltaje se sitúe por encima de los 12,5 voltios. Por otro lado, revisar el sistema de alumbrado también es fundamental para asegurar la buena visibilidad y si alguna bombilla está fundida sustituirla.
Cadenas para nieve
Las cadenas para nieve mejoran la adherencia en calzadas nevadas y/o heladas para una conducción segura. Es recomendable, sobre todo si se va a conducir en zonas de montaña o si se planea una escapada a la nieve, contar con unas ya que en muchas vías son obligatorias para circular. Aunque cada vez son más fáciles de colocar, es aconsejable familiarizarse con su instalación antes de salir a la carretera. Las cadenas de coche dependen del modelo del vehículo por lo que en Oscaro es fácil elegir las adecuadas para el tuyo gracias al sistema de identificación de modelo por matrícula.
Neumáticos de invierno
Además de estos cinco consejos, es importante revisar los neumáticos y renovarlos en caso de necesitarse.
Desde Afane, la agrupación de fabricantes de neumáticos, destacan que en esta época del año las carreteras son menos seguras por el frío, la lluvia, el hielo y la nieve. Por ello, en beneficio de tu seguridad, recomiendan los neumáticos certificados de invierno. Con ellos, la conducción es mucho más segura y permite, por ejemplo, olvidarnos del engorro y el riesgo que supone el uso de cadenas en la nieve.
Las dos categorías que componen los neumáticos certificados de invierno, los todo tiempo y los de invierno, destacan por ser más eficaces con temperaturas inferiores a 7 grados; por tener mejor capacidad de tracción, adherencia y frenada con lluvia hielo o nieve; y porque permiten (salvo en casos extremos) prescindir de las cadenas.
Y recuerda que la prudencia es la mejor compañera parea salir a la carretera en esta época del año.