Madrid. Fue el Shakespeare de Shakespeare in love y el comisario de Enemigo a las puertas, pero en los últimos años ha sido la televisión la que ha brindado mejores papeles a Joseph Fiennes, como el comandante Fred de El cuento de la criada, cuya segunda temporada alcanza “nuevos niveles de horror”. “Habrá más personajes y líneas argumentales, pero el corazón de la segunda temporada reside en el viaje de resistencia y supervivencia de Offred (Elizabeth Moss), llevado a nuevos niveles de horror”, señaló Fiennes a Efe. Sexto de seis hermanos de una familia de artistas, se considera “feminista” por educación. “Los hombres ya hemos hablado mucho. Es hora de que nos callemos y escuchemos la conversación”, aseguró.

La serie, basada en la novela homónima de Margaret Atwood, plantea un futuro en el que EEUU es gobernado por un régimen teocrático y puritano que despoja a las mujeres de sus derechos y les obliga a poner su cuerpo y sus ovarios a disposición del Estado”. La acogida el año pasado fue excepcional; aclamada por público y crítica, fue una de las triunfadoras en los Emmy y en los Globos de Oro. Esta etapa se centra en el embarazo de Offred y su denodada lucha para impedir que su futuro hijo caiga en las garras de los horrores distópicos de Gilead. “Gilead está dentro de ti”, le gusta decir a Tía Lydia. Offred y el resto lucharán contra esta terrible verdad... o sucumbirán en el intento

“Cualquiera que haya leído el libro puede ver paralelismos con el mundo real, tanto hoy como hace 34 años. Desde el principio de los tiempos ha habido regímenes fundamentalistas, leyes patriarcales y teocracias”, indica Fiennes. Dicho esto, precisa que “ha llegado en un momento especialmente relevante en el que el Gobierno de EE.UU., dirigido por hombres blancos mayoritariamente, ha propuesto leyes que atentan contra la autonomía de las mujeres sobre su cuerpo”. Sostiene Fiennes que, como hombre de su tiempo, casado y con dos hijas, el actual rebrote feminista, dentro y fuera de la industria del cine, le interesa especialmente y ve muy positivo el movimiento Time’s up que ha surgido en Hollywood para lograr la paridad. “Es una época importante para mí desde el punto de vista personal, político y artístico”, subraya. Hijo de la pintora y escritora Jennifer Lash, dice haber crecido viendo los efectos de la desigualdad en su carrera. “No quiero eso para mis hijas. No me sé de memoria las estadísticas, pero estamos al menos a 15 años de lograr la paridad real, aunque si eres negra o hispana podemos hablar de 200 años, es algo que realmente da miedo”, afirma.

En El cuento de la criada, el hermano de Ralph Fiennes da vida al comandante Fred, un hombre poderoso, del régimen, a quien le asignan a Offred como criada y esclava sexual. “No puedo ver a mi personaje como malvado, es un tipo impulsado por la voluntad de restaurar la moral decadente, pero el poder tiene efectos corrosivos”, opina. “Para mí fue lo más fascinante de esta historia, creo que contiene un discurso brillante sobre el fundamentalismo y los efectos corrosivos del poder”. La segunda temporada, que se estrena hoy en HBO España, se independiza del libro, aunque Atwood sigue vinculada a la serie como productora ejecutiva. “Lo que más me gusta es que precisamente por apartarse libro nadie tiene idea de lo que puede pasar, es excitante, hay tensión para el espectador”, opina el actor. Además de advertir sobre el peligro del autoritarismo, la serie contiene una lectura medioambiental que se acentuará esta temporada, según Fiennes. “Vamos a un lugar que se menciona en el libro, las colonias, donde las mujeres criminales son enviadas para limpiar residuos tóxicos, una especie de campo de concentración en el que se ven muy claramente los efectos devastadores de la polución”, señala.