MADRID. Bajo el título Jon Sistiaga en la ciudad del fin del mundo, en esta nueva entrega de Reportajes Canal + Sistiaga ha viajado esta vez a Chernóbil, a la llamada Zona de Exclusión, a ese lugar fantasmal en donde ningún ser humano podrá vivir en los próximos 24.000 años.

Así, el programa ha entrado dentro de la central nuclear que explotó en tiempos de la Unión Soviética y que a punto estuvo de llevar a la Humanidad a un verdadero cataclismo atómico.

En la conocida como Zona de Alienación, la naturaleza se ha comido a ciudades enteras y pequeñas aldeas que antes estaban habitadas. La amenaza invisible de la radiación se percibe a cada paso, ha explicado el canal en una nota de prensa.

Este reportaje se ha rodado además superando en todo momento los niveles máximos de exposición radiactiva que un ser humano puede recibir. "Si la profecía maya se equivocó respecto al final del mundo, en Chernóbil, la soberbia humana por controlar la energía a punto estuvo de hacerla cierta", ha concluido.