vitoria. Esta periodista madrileña cogió las riendas del programa poco después de la polémica entrevista de Ana Pastor a Esperanza Aguirre, pero esto no parece haber influido en su forma de llevar el programa. Insiste en la importancia de repreguntar y cree que los políticos se divierten. "Saben a lo que vienen", asegura. Ella les está esperando desde las cinco de la mañana.

¿Ya tenía que madrugar como subdirectora de "Los Desayunos"? ¿A qué hora tenía que llegar antes a la Redacción?

A la misma que ahora, el equipo de Los desayunos madruga al completo… nos levantamos a las 4 de la mañana, a las 5 ya estamos en la Redacción trabajando.

Ahora además tiene que poner cara de estar muy despierta. ¿Le resulta fácil a esas horas?

El maquillaje y la peluquería hacen maravillas… quizás la tensión también ayude.

¿Va con las noticias ya oídas desde casa?

Sí, por supuesto, en la vida de este equipo está siempre presente la radio, es lo último que oyes antes de ir a dormir y lo primero que escuchas por la mañana.

¿Desde cuándo trabaja en este programa?

Desde septiembre de 2009.

¿Cómo se produjo el paso de cubrir la baja maternal de Ana Pastor?

Ella siempre ha querido que alguien del equipo fuera la persona que asumiera la dirección del programa en caso de ausencia. Apostó por mí, hice una prueba y la dirección lo aprobó.

¿Le ha dado algún consejo?

Todos los días se lo pido.

¿Ha trabajado en otras ocasiones delante de la cámara? ¿Qué le gusta más: el anonimato o la visibilidad?

Ambas cosas tienen su valor añadido... En mi caso es muy gratificante salir delante de la cámara, pero también es muy satisfactorio trabajar detrás de alguien en quien crees.

En estas pocas semanas, ¿ha encontrado su propio estilo de presentar este espacio?

Sí, eso es inevitable, cada uno tiene su imagen, su tono y su singularidad… cada ser humano es único.

Informativo, entrevista, tertulia,... ¿en qué parte se encuentra más cómoda?

La parte informativa es apasionante, la entrevista y la tertulia aportan el análisis… ambas cosas hacen un círculo perfecto. Ninguna es prescindible en un programa como éste.

Ana Pastor se marchó poco después de la famosa entrevista con Esperanza Aguirre. ¿Han cogido miedo los políticos a ir a "Los Desayunos de TVE"?

No, en absoluto, se divierten aquí, saben a lo que vienen.

¿Se ha fijado si procuran ser más concretos, responder a lo que les pregunta, o siguen divagando?

Depende del personaje en cuestión.

¿Los políticos siempre están en guardia o tan temprano es más fácil que respondan con espontaneidad?

Sí, saben muy bien dónde están, saben su papel y también el nuestro, el de los periodistas.

¿Tardan mucho en preparar el cuestionario? ¿A veces cuesta más que hacer la propia entrevista?

Se elabora con antelación, pero también en el momento. El invitado responde a preguntas de toda la actualidad, incluso a las que están ocurriendo durante la entrevista.

¿Se desespera cuando avanza el tiempo y no ve que le hayan dado un titular claro?

En ese caso siempre queda una opción: repreguntar.

Cuando estudiaba, ¿dónde se veía en el futuro? ¿Pensaba en la televisión?

Nunca descarté nada, comencé en la radio porque era lo más apasionante para mí en ese momento. Cada medio tiene sus ventajas y la televisión tiene muchas.