Con un estilo directo para abordar temas complejos, utiliza su cercanía con los espectadores para conectar con el público, lo que la ha convertido en una referencia indiscutible. Tras su vuelta a TardeAR a finales del mes pasado y después de un periodo vacacional durante los meses de julio y agosto, la presentadora reflexiona sobre su larga trayectoria, los desafíos a los que se ha enfrentado en su carrera, su opinión acerca de las críticas que recibe y su perspectiva sobre el futuro del periodismo en una sociedad con un entorno cada vez más competitivo.

Teniendo en cuenta el ámbito periodístico en el que trabaja, suele tratar temas delicados, a veces incluso controversiales. Por este motivo, quizá, ¿se ha visto alguna vez obligada a tomar una postura que no reflejaba su verdadera opinión por cuestiones profesionales o externas?

Vamos a ver, yo creo que me puedo equivocar, como todo el mundo. Y más siendo alguien que lleva tantos años haciendo programas en directo, pero yo intento dar mi opinión de una forma clara, ya está. Te puedes equivocar en algún asunto, pero cuando tú tienes un programa de tres horas diarias y muchas personas que lo siguen, no lo siguen solamente porque se esté hablando de un tema o de otro. También lo siguen porque quieren saber la opinión de los comunicadores respecto a algunos asuntos. Entonces, yo creo que ahí hay que ser valiente. 

Aparte, no hace mucho que pasó por momentos bastante difíciles respecto a su salud. ¿Qué es lo que más le ha motivado a seguir adelante cada día?

En esos momentos difíciles lo que he tenido ha sido mucha compañía, pero no solo muchísima de mis compañeros o de la gente que me quiere y que me conoce, sino de muchísimas personas anónimas. Ha sido absolutamente impresionante. Yo ya he recibido mucho más de lo que he dado. 

También se habrá tenido que enfrentar a muchos desafíos, pero, ¿cuál ha sido el mayor y cómo lo ha enfrentado?

¿Mi mayor desafío? No te lo podría decir ahora, pero ha habido muchos momentos. Oye, yo he sido redactora, me he quedado en el paro, me he puesto a trabajar… Yo creo que al final de lo que se trata es de que, si en algún momento de la vida profesional te pasa un tren, hay que ser valiente para cogerlo y hay que estar preparado para cogerlo. Entonces, si estás durmiendo la siesta, por ahí el tren va a pasar de largo, pero si tú te has preparado, si te gusta, si haces bien tu trabajo, seguro que te va a ir bien. 

"El periodismo no es solamente hacer una información objetiva, es también opinar y hacer un control político y social de las cosas"

Fue a finales del mes pasado cuando volvió a TardeAR, por lo que también ha vuelto acompañar a muchas personas como ha estado haciendo con el paso de los años casi todos los días a lo largo de su carrera. Entonces, ¿qué legado le gustaría dejar en el mundo del periodismo y la televisión?

No tengo esa ambición. Para mí es mi vida, ha sido mi vida desde que empecé la carrera de Periodismo. A mí me apasiona lo que hago. Me doy cuenta de que soy una afortunada de poder trabajar en lo que me gusta, puedo trabajar con quien quiera, gracias a Dios, desde que montamos ya hace muchos años la primera productora. También puedo trabajar con las personas del equipo que me gustan y con las que tengo afinidad, con las que me siento segura. Me siento una afortunada por eso. Creo que una de las cosas más importantes es, primero, ver qué familia te toca cuando naces, y después, poder trabajar en algo que te apasiona porque dedicas la parte más importante de tu vida al trabajo. Yo no quiero dejar absolutamente nada. Quiero que durante estos años hayamos podido acompañar a personas, que eso también es importante, ¿no? Hay mucha soledad, y no solamente es informar, sino también entretener y también acompañar.

Con los cambios que ha habido en esta carrera en los últimos años, ¿cómo ha evolucionado, desde su punto de vista, la visión del periodismo desde que comenzó hasta el día de hoy?

Pues yo creo que el periodismo es más o menos el mismo, lo que va cambiando es la sociedad. Pero al final nuestra profesión es contar lo que ocurre en el momento en el que te ha tocado vivir, y contarlo de una forma honrada. Te puedes equivocar, todo el mundo tenemos nuestra educación, nuestros valores, que eso también pesa, pero hay que intentar ser objetivo. Otra cosa es ser valiente; el periodismo no es solamente hacer una información objetiva, es también opinar y hacer un control político y social de las cosas que ocurren en la sociedad. También es un compromiso.

Después de todo lo que usted ha vivido, ¿qué consejo le daría a los jóvenes periodistas que aspiran a vivir tantas experiencias como las suyas?

Esto nunca se sabe, yo nunca pensé llegar a nada. Yo lo que quería era ser periodista y ser reportera, y luego la vida te va llevando. El que tenga verdadera vocación, el que tenga verdadera pasión por el periodismo, que es la profesión más maravillosa del mundo para mí, que siga trabajando, que no se rinda. La vida, como la profesión, es muy larga y hay de todo, momentos buenos y momentos malos, pero que persiga sus sueños. Es importante en la vida tener constancia, y si es lo que tú quieres, luchar por ello.

Trayectoria

La extensa carrera de Ana Rosa Quintana comenzó en la radio, donde adquirió una gran experiencia en el periodismo informativo. Su salto a la televisión llegó con TVE, donde se consolidó como una profesional de los programas informativos.

En 2005, estrenó El Programa de Ana Rosa en Telecinco, un magazine matutino que se posicionó como líder de audiencia durante varios años, combinando actualidad, política, sucesos y entretenimiento con entrevistas exclusivas y debates que marcaron la agenda mediática.

Actualmente, la periodista se encuentra presentando TardeAR, un programa similar al anterior durante el horario de las tardes. Aparte, la comunicadora madrileña ha recibido varios premios y ha publicado libros, además de que mantiene una activa participación en el ámbito periodísitco hoy en día.