Los sindicatos ELA, CCOO, UGT y Steilas han desconvocado las huelgas previstas en febrero y que comenzaban este martes tras alcanzar un acuerdo con las patronales Kristau-Eskola y AICE-IZEA en torno al convenio colectivo.

El acuerdo recoge las tres principales reivindicaciones de las plantillas: garantizar el poder adquisitivo, reducir las cargas de trabajo y mantener los puestos de trabajo.

Incremento salarial

En concreto, el convenio tiene una vigencia de 2021-2024 y garantiza el IPC durante todos esos años. En consecuencia, las personas trabajadoras del sector tendrán un incremento salarial del 16%, sin que la financiación pública o la homologación limite la subida salarial, garantizando así el poder adquisitivo del personal. Concretamente, este incremento total acumulado en el periodo 2021-2024 se recoge con una subida salarial del 1,52% en 2022, del 5,44% en 2023, y del 8,4% en 2024.

Cargas de trabajo

En cuanto a las cargas de trabajo, dentro de los sectores feminizados en el primer ciclo de Educación Infantil las docentes tendrán una reducción de jornada de 20 horas anuales y el personal auxiliar de 38 horas. En el caso de los especialistas de apoyo educativo (EAE), se rebajará la jornada anual en 20 horas y sus horas complementarias pasarán a ser de tres horas semanales para jornadas completas y de dos horas semanales para jornadas parciales. En el caso del PAS (Personal de Administración y Servicios) se rebajará la jornada anual en 25 horas.

En el resto de personal, para los titulados no docentes, se rebajará la jornada anual en 20 horas y para el resto del personal docente, se reducirá una hora lectiva en cada etapa y, además, se aplicará un incremento de dos horas complementarias de trabajo personal en todas las etapas educativas.

Se incluye el procedimiento de regulación de desdobles y horas de compensación en la Formación Profesional, así como cláusulas en el convenio colectivo para que el acuerdo de recolocación sea garantista, igual que en las ikastolas.

Mantenimiento de los puestos de trabajo

De cara a los puestos de trabajo, se incluyen el acuerdo y el reglamento de recolocación, con medidas concretas y eficaces. Asimismo, se solicitará al Departamento de Educación la renovación del acuerdo para la recolocación.

De esta forma, igual que en el acuerdo de las ikastolas, habrá un procedimiento para acordar nuevas medidas de mantenimiento del empleo ante el descenso de la natalidad. Como consecuencia de ello, en los próximos meses se negociarán y acordarán nuevas medidas para la creación de puestos pertenecientes a nuevas categorías que, a su vez, serán para reforzar la competencia lingüística y el euskera, mejorar la atención al alumnado con necesidades especiales, profundizar en la innovación educativa, mejorar la gestión y para la reducción de cargas de trabajo.

Junto a ello, habrá un análisis de las medidas concretas para llevar a cabo planes adicionales de renovación juvenil de los trabajadores mayores de 60 años, según LAB.

El acuerdo también contempla otros aspectos como los relativos a la elaboración de Planes de Igualdad en los centros educativos y también otro sobre los planes de euskera, donde se extiende la formación relacionada con el euskera a todo el personal de los centros educativos. El personal que realice los cursos dispondrá de dos años para la obtención del nivel PL2.

En Formación Profesional se recoge que en las clases de prácticas de más de 19 alumnos habrá un segundo profesor o profesora, y en la formación en centros de trabajo se garantizará un mayor número de horas para el seguimiento del alumnado, entre otras medidas. 

El convenio sectorial caducó hace tres años y desde entonces se han celebrado diversas reuniones y 14 jornadas de huelga. El sector está formado por 9.000 profesionales, con más de 130.000 estudiantes.

AMPAs Unidas dice que el acuerdo pone "un parche al pinchazo" 

Mientras, AMPAs Unidas ha celebrado el acuerdo 'in extremis' en la educación de Iniciativa social que evita las nuevas huelgas que estaban convocadas esta semana y la que viene, pero ha advertido que "el contenido vago del acuerdo sirve para poner el parche al pinchazo, pero esto no va a acabar y el conflicto se reactivará".

En un comunicado, desde AMPAs Unidas han mostrado su alegría por este acuerdo que, según ha dicho, va a permitir que sus hijos puedan, "por fin, recibir la educación a la que tienen derecho". No obstante, han advertido que, después de dos conflictos han aprendido que estas situaciones son "cíclicas" y el convenio firmado hoy tiene vigencia hasta el 31 de diciembre de 2024, lo que les hace temer que esta situación "pueda producirse nuevamente y en el 2025 nos veamos otra vez con la pancarta y en la calle defendiendo a ese alumnado que ha sido el gran olvidado de este conflicto".