Donostia ha vuelto a colgar el cartel de completo esta Semana Santa y no hay más que pasear por sus calles para percatarse del volumen de gente que estos días visita la ciudad. Este llenazo se refleja, sobre todo, en bares y restaurantes, donde los turistas hacen cola para poder encontrar un sitio en el que comer o, simplemente, disfrutar de unos pintxos.

La Parte Vieja es, sin duda, el epicentro de la congregación de estos turistas, y estas fechas festivas están dejando algunas imágenes curiosas, como las largas colas formadas esta mañana en la calle 31 de agosto, con decenas de personas esperando a que el bar La Viña abriera sus puertas para hacerse con sus populares tartas de queso.

Desde que algunas revistas y guías de viajes incluyeron este producto en sus reportajes, el éxito de esta tarta no ha dejado de crecer. De hecho, el pasado 2020, The New York Times, la escogía como "sabor del año", visibilizando así un éxito que parece que no toca techo.

Conscientes del éxito, en La Viña no solo ofrecen porciones de su plato estrella para degustar en el lugar, sino que hacen encargos para llevar. Los dueños del local insisten en que su secreto radica en que es una receta "sencilla y fácil de hacer".