El incendio que desde el pasado jueves afecta al interior de Castellón afronta las próximas horas una situación "crítica", sobre todo entre las 14.00 y las 18.00 horas, cuando se esperan fuertes rachas de viento de poniente que alcanzarán los 50 kilómetros por hora, una humedad por debajo del 20 % y altas temperaturas.

Así lo ha señalado la consellera de Justicia e Interior, Gabriela Bravo, en el Puesto de Mando Avanzado (PMA) que coordina los trabajos de extinción, centrados esta mañana en el barranco de Maimona, donde se han concentrado prácticamente todos los recursos, y en evitar que las llamas "salten" a la carretera CV-195, entre Montán y Montanejos, y a la CV-20.

Bravo ha indicado que en la zona trabajan en este momento 500 efectivos terrestres y 18 medios aéreos, y la Generalitat Valenciana no descarta pedir más recursos aéreos al estado para combatir el fuego, que continúa sin control.

Según ha precisado, se han establecido líneas de defensa para que no afecte al Parque Natural de la Sierra de Espadán, y si la evolución del incendio fuera muy desfavorable "se adoptarían todas las decisiones necesarias para proteger a la población", como nuevos desalojos.

"Las decisiones necesarias para proteger a la población son fundamentales y además tenemos que hacerlo con tiempo suficiente para evitar cualquier percance", ha señalado al respecto.

Bravo ha informado de que "ya nos estamos interesando en la situación de los vecinos y si hay personas enfermas para tenerlo todo previsto" en el caso de que se tome la decisión de evacuarles.

La consellera ha pedido además "máxima prudencia" a la población y que eviten acceder a carreteras secundarias. Según ha lamentado, ayer se interceptó a 14 ciclistas en vías próximas al incendio.

PREOCUPA EL BARRANCO DE MAIMONA

    La evolución del incendio esta noche había sido positiva, con un perímetro de la huella del fuego (de unos 40 kilómetros) estable, pero sobre las 08.00 horas ha habido una reproducción de las llamas por el fuerte viento de poniente en el barranco de Maimona, de muy difícil acceso.

Es en esta zona donde están concentrados ahora todos los recursos de extinción como "líneas de defensa" para evitar que el fuego avance, y hay otra zona preocupante, pero en menor medida, en este mismo flanco.

Entre las 14.00 y las 18.00 horas van a ser los momentos "críticos" que determinarán la evolución del incendio, ya que en este intervalo se esperan rachas de viento de hasta 50 kilómetros por hora y un nivel de humedal inferior al 20 %.

"Esto no ayuda", ha advertido la consellera, quien ha señalado que se seguirá trabajando para "intentar frenarlo y evitar que las llamas adquieran mucha más fuerza de propagación".

Por otro lado, Bravo ha afirmado asimismo que "todavía es pronto" para que las personas desalojadas hasta ahora en la provincia de Castellón -unas 1.500- puedan regresar a sus casas porque "tal y como se está comportando el incendio generaría además un grave riesgo para la población".

"Los vecinos y vecinas que están fuera de sus casas tienen que saber que la decisión se ha adoptado para protegerles porque para nosotros es lo más importante, como también la vida de los profesionales" que están participando en las labores de extinción.

Bravo ha explicado que los trabajos en la zona del barranco de Maimona están siendo muy complejos por la orografía y ha afirmado que la estrategia para combatir el fuego "también tiene que tener en cuenta que no se puede poner en peligro la vida de ningún profesional".

SIGUE LA INVESTIGACIÓN SOBRE ORIGEN INCENDIO

    La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé, ha informado de que las investigaciones sobre el origen del fuego siguen abiertas, aunque la principal hipótesis sigue siendo el factor humano, y se investiga a cuatro personas que han declarado ya ante la Guardia Civil.

Bernabé ha rehusado precisar la identidad de estas personas y las circunstancias en las que se produjo el incidente, que provocó el incendio que ha arrasado ya cerca de 4.000 hectáreas, hasta que "se cierre" la investigación.