- SATSE, ELA, LAB, CCOO y UGT han anunciado que no van a acudir a las reuniones bilaterales propuestas por la Dirección de Osakidetza, que ven “vacías de contenido”, y han convocado a una reunión el próximo miércoles en la sede del CRL Consejo de Relaciones Laborales (CRL).

Tras no acudir a la mesa sectorial convocada para el pasado día 24 y las huelgas celebradas los días 25 y 28 de febrero, los sindicatos apuestan ahora por trasladar la negociación al CRL, un órgano consultivo en el que se dirimen conflictos laborales.

Según un comunicado conjunto, el motivo de ir al CRL es que consideran “imprescindible una negociación real, con contenidos y que aborde los problemas estructurales de Osakidetza, circunstancias que no se dan en la mesa sectorial”. Según los sindicatos, ese es “un foro de carácter meramente informativo, en el que no se negocia nada por la actitud de Osakidetza”.

Los sindicatos han desvelado que han recibido convocatorias a reuniones bilaterales en las que se plantea abordar un único punto, “Desarrollo Profesional: cumplimiento del Preacuerdo y elaboración del nuevo modelo”.

Los sindicatos han respondido que “estamos hablando de un acuerdo alcanzado el pasado mes de julio con algunos de los sindicatos que conformamos la mesa sectorial, cuya fecha de cumplimiento era 31 de diciembre de 2021, acuerdo que de manera unilateral Osakidetza sigue sin cumplir a día de hoy”.

Por ello, han anunciado que no van a acudir a las reuniones bilaterales a las que han sido convocados y han apostado de forma conjunta por convocar a Osakidetza en la sede del CRL el próximo miércoles día 9. En ese encuentro quieren negociar reivindicaciones ya conocidas, como aumentar el presupuesto de Osakidetza para el ejercicio 2023, hasta llegar a la media de la UE (7% del PIB), destinando un 25 % del mismo a la atención primaria.

También un adecuado dimensionamiento de las plantillas con la creación de miles de puestos de trabajo, que permitan racionalizar las cargas de trabajo y dar una atención de calidad a la ciudadanía, así como acabar con la temporalidad que sufren más de 24.600 trabajadores hasta rebajarla al 8%.