La lava del volcán de La Palma, que continúa fluyendo con profusión en las últimas horas, ha aumentado la altura de las coladas ya existentes, mientras continúa la actividad sísmica en la zona, con terremotos de hasta 4,8 de magnitud que han podido sentirse en otras islas del archipiélago.
La deformación del terreno en la estación más cercana al cono volcánico mostraba ayer martes un incremento de hasta 10 centímetros.
Según el último informe del Departamento de Seguridad Nacional (DSN) emitido a las ocho de esta mañana, hora peninsular, en las últimas horas la lava está aumentando la altura de las coladas y rellenando las islas que se han creado entre ellas.
El DSN sitúa la superficie afectada por la erupción volcánica en 879,69 hectáreas y asegura que el escenario meteorológico actual es favorable para la operatividad de los aeropuertos de la zona. Sin embargo, indica que la inversión térmica y los vientos débiles en la vertiente oeste "podrían provocar un escenario puntualmente desfavorable para la calidad del aire".
Actividad sísmica en la isla
Pasada la medianoche se ha localizado un terremoto de magnitud 4,8 en Villa de Mazo, el segundo con apenas siete horas de diferencia de la misma magnitud y en la misma localidad, según datos del Instituto Geográfico Nacional (IGN).
Ambos terremotos, con una intensidad de IV en una escala de I a XII, han podido ser sentidos no solo en la isla de La Palma, sino también en Tenerife, El Hierro y La Gomera. Entre la medianoche y las 6:52 hora peninsular se han localizado 70 terremotos en La Palma, todos ellos concentrados en la zona de Villa de Mazo y Fuencaliente.
El de mayor intensidad se ha registrado a las 0:53 en Mazo, de 4,8 de magnitud, a 33 kilómetros de profundidad, seguido de otro de 4, en la misma localización, a las 3:16 de la madrugada y 13 kilómetros de profundidad, con la misma intensidad, IV. Del resto de seísmos, 23 han tenido magnitud superior a 3.