- La pequeña isla italiana de Lampedusa (sur) atraviesa una situación “insostenible” por la constante llegada de inmigrantes desde el norte de África, lo que ha saturado su sistema de acogida, según denunció ayer su alcalde, Salvatore Martello. “Si el Gobierno no declara el estado de emergencia en Lampedusa lo haré yo. El centro de acogida ya no puede recibir más inmigrantes”, advirtió a los medios.
En los últimos días han llegado a esta isla 14 pateras, la mayoría con tunecinos a bordo, lo que ha colapsado el centro de acogida de inmigrantes, que aloja a unas mil personas. El problema principal, subrayó el regidor, es que ayer no se preveía ninguna evacuación de inmigrantes a la ciudad siciliana de Puerto Empedocle, como viene sucediendo en los últimos días para descongestionar la isla, y las pateras no dejan de llegar.
La ONG alemana Sea Watch supervisa la zona con su avión Moonbird y el viernes mostró a una patera neumática cargada con más de cien personas que estaba prácticamente hundida, aunque finalmente fue interceptada por un buque mercante a petición de Malta.
El flujo migratorio desde el norte de África se ha intensificado en verano. En lo que va de año, hasta el viernes, han desembarcado en Italia 11.334 inmigrantes, más del triple que los 3.508 del mismo periodo del 2019. Algunos llegan de forma autónoma en pateras y otros después de ser interceptados por buques mercantes o militares y, dado la creciente presión a las ciudades del sur italiano, a menudo tienen que ser trasladados a otras localidades del país.
ACNUR alerta. La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) llamó el viernes a Polonia a garantizar los derechos de las personas que “huyen de la guerra y la violencia” y buscan protección internacional y asilo en el país. En un comunicado, el organismo recordó que solicitar asilo es un derecho fundamental, protegido por la legislación de la UE y las normas internacionales, incluida la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, de la que forma parte Polonia. “Las personas que huyen de la guerra, la violencia y la persecución necesitan protección. La negativa a otorgarles la entrada en la frontera, sin evaluar adecuadamente sus solicitudes, está en dicotomía con las obligaciones del país”, afirmó la directora regional para Europa, Anne-Marie Deutschlander.