Entrados en la fase 2, la mayoría de la población solo está a falta de una última etapa, la fase 3 para alcanzar la denominada "nueva normalidad". Pero, ¿cómo será la vida post-coronavirus? ¿Se volverá a las rutinas y costumbres previas a la pandemia?
De momento, lo único que se sabe a ciencia cierta y que publica el Ministerio de Sanidad en el plan para la transición hacia la nueva normalidad, es que se "terminan las restricciones sociales y económicas, pero se mantiene la vigilancia epidemiológica, la capacidad reforzada del sistema sanitario y la autoprotección ciudadana".
Uno de los sectores más afectados por el coronavirus es el hostelero, y por lo tanto será uno de los que más tenga que adaptarse a la nueva realidad. De momento, en esta fase está permitido que además de servir en terrazas se pueda acceder al interior de los locales con limitación del aforo. Y en la siguiente fase, la 3, se podrá servir en las barras: " Se permite gente de pie con separación mínima de 1,5 metros entre los clientes de la barra. En terrazas: se limitará al 50% de las mesas permitidas en años anteriores en base a la licencia municipal".
Pero, ¿y después? ¿cómo serán los locales hosteleros en la nueva normalidad?
Aunque hay pocos referentes de la vida "post-pandemia", China es uno de los países a los que se puede mirar para intuir cómo evolucionará el sector hostelero debido a la crisis del coronavirus. Una de las medidas que se ha tomado allí ha sido colocar mamparas transparentes que separen unas mesas de otras, y de ese modo, separar comensales entre sí, y a los camareros.
Controles de temperatura de empleados y clientes es otra de las opciones que se barajan para la nueva normalidad. Además, como se está haciendo ya en las distintas fases de las desescalada, los restaurantes deberán dedicar más tiempo a la desinfección de vajillas y espacios, y se priorizará que objetos como servilletas, cubiertos o manteles sean de un solo uso para evitar los contagios entre clientes.
Incluso podrá haber medidas de desinfección para los comensales como tener que pasar por arcos higiénicos desinfectantes como los que se han podido ver en Asia en las últimas semanas.
Por otro lado, el pago con tarjeta evitará propagar el virus con el intercambio de billetes y monedas, y las cartas como las conocíamos ahora se debería evitar, cambiándolas como se ha recomendado hasta ahora por papeles desechables o por pizarras.