El buque vasco Aita Mari busca cuatro pateras en peligro en el Mediterráneo central tras recibir el aviso sobre la situación de estas embarcaciones cuando navegaba por la costa siciliana de vuelta a España para llevar a cabo las labores de mantenimiento mientras sus promotores siguen la evolución de la pandemia de COVID-19.
La ong Salvamento Marítimo Humanitario (SMH), responsable del barco, ha informado este lunes en un comunicado de que el buque salió ayer de Siracusa (Sicilia), donde se encontraba amarrado debido a la situación sanitaria de Italia.
Sin embargo, la tripulación ha variado la ruta tras recibir el aviso de que había varias embarcaciones en peligro en el mar y que "ni Italia ni Malta habían desplegado una operación de búsqueda y rescate", señala el comunicado.
La alerta partió de la ONG Alarm Phone que informó de que había "tres barcos en peligro en la zona de búsqueda y rescate de Malta" con al menos 173 personas a bordo, y un cuarto, con 83 personas, con la que se había perdido el contacto, según explica SMH.
Una de las pateras lleva cuatro noches en alta mar, no tiene agua potable a bordo y cinco de las personas que transporta, entre las que hay mujeres y niños, están inconscientes, afirma SMH.
Aseguran que no pueden "informar sobre la localización de ninguna" de estas embarcaciones y que la previsión meteorológica empeora.
La ong ha criticado que "ninguna autoridad europea, a través de la misión marítima de Frontex, ni los países ribereños (Italia y Malta) han movilizado, como marca la ley, a sus unidades de rescates".