Gasteiz - El lehendakari Iñigo Urkullu anunció ayer que el Gobierno Vasco se personará en la causa abierta contra la empresa propietaria del vertedero, Verter Recycling, por un posible delito ambiental y laboral. "El Gobierno va a exigir todas las responsabilidades a la empresa. Nadie debe tener ninguna duda: la verdad prevalecerá y se juzgará", garantizó.
Tras enumerar todas las acciones llevadas a cabo por el Ejecutivo en los diferentes ámbitos del accidente desde que se produjo el derrumbe del vertedero el día 6, Iñigo Urkullu Urkullu puso sobre la mesa que toda la actuación de las administraciones públicas en este caso está siendo "subsidiaria", ya que se trata de un ámbito "que, en realidad, corresponde a la empresa. Es una empresa privada en un terreno privado. El derrumbe es un tragedia que afecta a dos personas desaparecidas y puede afectar también a la calidad de vida de los vecinos, sí; pero la actuación de la Administración es subsidiaria. Lo estamos haciendo y lo tendremos que seguir haciendo". De hecho, se han incoado ya los correspondientes expedientes sancionadores contra la firma y el Gobierno Vasco se personará en la causa abierta en los juzgados contra Verter Recycling.
Urkullu explicó que, "desde el primer momento", la Ertzaintza abrió diligencias sobre lo ocurrido y las presentó en el juzgado correspondiente "para investigar esta desgracia". También se abrieron expedientes desde Osalan, la Inspección de Trabajo y el departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda. "Toda la información recabada y documentada permitirá delimitar con claridad las causas y responsabilidades en relación con este caso. La Justicia decidirá. Nuestra responsabilidad es que lo haga contando con todos los elementos de juicio". Para ello, señaló, se va a "redoblar" el esfuerzo para investigar lo ocurrido.
Al detalle
Aliviaderos. El lehendakari informó ayer ante la comisión de que se están construyendo aliviaderos para que el agua de lluvia no entre en el vertedero, minimizando de esta forma el riesgo de que se produzcan más deslizamientos. El derrumbe destrozó todo el sistema de drenaje, por lo que en caso de lluvia el agua de escorrentía cae por la ladera sin control.